miércoles, 22 de febrero de 2012

¿Qué ha sido de... Vikash Dhorasoo?



Leía el otro día acerca de la creación de la liga india, que ha decidido importar algunas estrellas ya en el ocaso de su carrera para intentar atraer a un público virgen balompédicamente hacia los estadios. Pensaba entonces en jugadores que hubieran nacido en aquél país y descubría con resignación que no había demasiados. La referencia más cercana que encontré fue la de nuestro protagonista, uno de los futbolistas más talentosos de su generación y que gracias a los orígenes de su padre es, junto a Aaron Winter, el único jugador de esa ascendencia en disputar un Mundial

De hecho a pesar de que él nació en Francia, sus raíces proceden de otras partes del mundo. Dhorasoo fue a caer en el país galo como retoño del matrimonio que su padre mantuvo con una con una mauriciana después de que sus antepasados se trasladaran en busca de nuevas oportunidades a esta pequeña isla situada a 900 kilómetros de Madagascar.

En un núcleo familiar acostumbrado a los movimientos migratorios y a los viajes transoceánicos era casi previsible que viera la luz en una ciudad con puerto. La elegida fue Harfleur, la más importante en este campo dentro del noroeste del país hasta la creación de Le Havre, que se encargó de fagocitarla y convertirla en un pueblo de extrarradio. El mismo pueblo de menos de 10.000 habitantes en el que posteriormente también sería alumbrado Charles Nzogbia.

Por todo ello no os sorprenderá que sus primeros pasos como profesional los diera en "Le club doyen", donde estuvo hasta los 25 años, momento en el que fue reclutado por el Olympique de Lyon, que entonces apenas era considerado un equipo emergente. Con él y otros futbolistas llegó el salto de calidad definitivo que convertiría al club en un ente dictatorial en lo que a títulos nacionales se refiere.

Sin embargo, de las siete ligas conquistadas de forma consecutiva solo pudo levantar dos. Cuando se consiguió la primera se desenvolvía como cedido en el Girondins y para cuando llegó la cuarta se había encargado de echarle el lazo el Milán aprovechando sus desavenencias con Le Guen. Su primera experiencia en Italia fue bastante decepcionante y aunque conquistó una medalla de subcampeón de Europa (fue triste protagonista de la remontada del Liverpool) apenas tardó un verano en regresar a su patria.

Lo hizo para enfundarse la camiseta del PSG. Necesitaba recuperar el tiempo perdido y lo hizo a pasos agigantados con actuaciones portentosas que le valieron para disputar la Copa del Mundo de 2006. Aquél torneo sería el último en el que representaría a su nación entre otras cosas porque, a pesar de voces como la del seleccionador Domenech que le recomendó no hacerlo, decidió publicar un documental titulado "Substitute" y grabado por él mismo durante el mes de concentración.

Fueron sus días de furia ya que a la vuelta de aquél incidente se permitió poner a parir a su entrenador Guy Lacombre en una entrevista concedida al diario L'Equipe, lo que le convirtió en el primer pelotero despedido por un club francés desde el año 1973. Esos comportamientos le cerraron las puertas de entidades punteras y se pasó casi un año en el dique seco.

Fue entonces cuando decidió acudir en su rescate el Livorno. En un principio aceptó la oferta pero no llegó a debutar ofendido porque, en buena lógica, le dijeron que primero debería entrenar con el primavera para valorar su estado físico. Finalizado aquél viaje y tras rechazar alguna que otra propuesta, se retiró y se dedicó a otros placeres de la vida.

Tras actuar en una película se propuso, sin éxito, ser presidente del Le Havre. Como ese capricho se frustró decidió trasladar sus intenciones al L'Entente Sannois Saint-Gratien, un club amateur. Por supuesto esa actividad no ocupa todo su tiempo libre, si es que se puede decir que tiene de eso.

Defensor de las causas sociales y también del socialismo patrocina a un club, el Paris Foot Gay, que lucha contra la homofobia al tiempo que ha mostrado su recelo hacia Sarkozy apoyando primero a Ségolène Royale y últimamente a François Hollande. Se puede decir de hecho que le gusta estar cerca del poder pues también intentó, sin éxito, entrar en una candidatura para la presidencia de la Federación de Fútbol.

Y por si fuera poco también ha colaborado estos últimos años con varios medios de comunicación... y juega al póker. Y según cuentan bastante bien, hasta el punto de que ha sacado jugosas tajadas en partidas a lo largo del globo. Un tipo peculiar al que definieron en su día como "el jugador de fútbol de la melancolía".

1 comentario:

Rubén Pedreira dijo...

Un mítico, lo recuerdo sobre todo por su etapa en el Milan, y me dejó la sensación de ser un buen jugador mal adaptado al Calcio.

Es complicado encontrar jugadores indios, sí. Así a bote pronto sólo se me viene a la cabeza el nombre de Harpal Singh, centrocampista de escaso éxito muy asiduo de las ligas inferiores de Inglaterra que creo que tenía nacionalidad inglesa pero era nacido en India.