viernes, 31 de enero de 2014

Hablando de fútbol con... Luis Milla (ex técnico del Al-Jazira): "La liga en los Emiratos Árabes está empezando. Creo que va a ir arriba"


Como bien os anuncié en el último post, hoy os traigo una nueva entrevista. En esta ocasión el protagonista es Luis Milla, técnico hasta hace pocos meses del Al-Jazira de Abu Dhabi. De su paso por los Emiratos y también de su experiencia trabajando con las inferiores de la selección española habla en esta charla exclusiva con "De paradinha". Os pido disculpas de antemano por los posibles problemas de sonido ambiente que podáis encontrar.

lunes, 27 de enero de 2014

La grandeza del "Tigre"

Hay futbolistas cuya figura trasciende más allá del césped. Jugadores en los que muchos quieren verse reflejados; sus compañeros, los rivales, una afición, incluso un país entero. Son aquellos que se crecen en la adversidad, que siempre miran hacia adelante con optimismo y saben comportarse de puertas adentro y también de puertas afuera. Es el caso del colombiano Radamel Falcao.

Puedo decir, sin miedo a equivocarme, que en mi corta experiencia como periodista deportivo pocas veces me he cruzado con un profesional tan correcto. Posiblemente no haya intercambiado con él más de treinta o cuarenta palabras pero la imagen que me ha dejado es inmejorable. Es alguien que nunca niega un saludo o una firma, que se dirige a todos por igual, que siempre luce una sonrisa sincera y si de algo peca es de humilde. Una persona normal que huye de su condición de estrella.

Mi opinión se basaba hasta ahora solo en la observación pero son los gestos que han rodeado a su grave lesión los que me hacen pensar que mi intuición no me falla. Su grandeza se aprecia, por ejemplo, en el homenaje que le rindió el Calderón. También en la cantidad de personalidades que han querido tener un recuerdo hacia él. En el apoyo masivo a través de las redes sociales. Solo quien deja poso es digno de esos elogios.

Su comportamiento y entereza para afrontar las cosas como han venido también le dejan en buen lugar. Lo demostró primero desnudando sus sentimientos en un mensaje difundido a través de Twitter y más tarde utilizando el mismo canal para perdonar públicamente a Soner Ertek. Un gesto necesario no solo para limpiar la conciencia de este profesor de escuela que cruzó su destino con "El Tigre" vistiendo la camiseta del Chasselay sino para calmar los ánimos de algunos colombianos exaltados que le habían amenazado, perturbando una vida que hasta ese fatídico momento era tranquila y anónima.

Allí, en su país, es donde más se ha vivido una noticia que abría todos los Telediarios. El sufrimiento que muchos españoles teníamos al ver a Rafael Nadal sacando a 125 km/h en la final del Open de Australia con ostensibles gestos de dolor es el que los compatriotas de Falcao experimentaron cuando le vieron retirarse en camilla.

Se apagaba su faro, su guía, un punta bipolar que es terrenal en la calle y despiadado en el área. Todos los aficionados queremos ver a los mejores en los grandes torneos. Por eso se hace necesaria la presencia del "nueve" cafetero en Brasil. Comienza ahora una carrera contra el destino, un sprint mental y físico para poder disputar un torneo por el que ha peleado. Voluntad no le va a faltar. Tampoco el ánimo de todos los que han coincidido con él. Ojalá sus rugidos resuenen en las playas de Copacabana. Por el bien del fútbol.

Por cuestiones personales no puedo garantizar que haya post el próximo miércoles, aunque lo intentaré. En caso de que no fuese posible, la segunda parte sobre el serial del draft de la MLS quedaría para la semana que viene. Sí puedo anunciar que el viernes colgaré la entrevista realizada a un técnico español que hasta hace poco tiempo entrenaba en el extranjero.

miércoles, 22 de enero de 2014

¿Qué ha sido de... Los números uno del draft de la MLS (I)?

La semana pasada tuvo lugar una nueva edición del Draft de la MLS estadounidense con un claro protagonista, Andre Blake. El portero jamaicano se convirtió en el primer jugador en su puesto que se corona como el número uno tras ser elegido por los Philadelphia Union. Le siguieron en el podio dos compatriotas, Damion Lowe (Seattle Sounders) y Andre Lewis (Vancouver Whitecaps). Todo un triunfo para la isla caribeña y una excusa para que este blog repase los nombres, desde el 2000 hasta la actualidad, de otros que en su día tuvieron el honor de ocupar el escalón superior entre los jóvenes más prometedores. Aquí os dejo la primera entrega. Completaré el serial la semana que viene.

Steve Shak: Elegido por el Metrostars, actual New York Red Bulls, en el primer Draft de la historia (2000); este zaguero se impuso a otros favoritos para el puesto como Carlos Bocanegra. Posteriormente probó suerte en los Colorado Rapids, en los Hampton Roads Piranhas y en los Minnesota Thunder antes de marcharse a Europa para vestir la elástica del Bodens BK, club de segunda división sueca. Los Virgina Beach Mariners y los Charlotte Eagles, donde ejerce como técnico asistente, fueron sus últimos destinos.

Chris Carrieri: El centrocampista tejano no salió de Norteamérica durante todo su periplo futbolístico. Drafteado por los San José Earthquakes, llegó a coincidir junto con Shak en los Rapids cuando las carreras de ambos comenzaron. Posteriormente buscaría su oportunidad en ciudades como Rochester, Chicago, Richmond o Cary.

Chris Gbandi: Convertido en el primer jugador nacido fuera de Estados Unidos que se consagró como el mejor entre los mejores, este liberiano superó incluso a un posterior internacional como Taylor Twellman. Dallas y Fort Lauderdale fueron sus franquicias. Entre medias viajó a Noruega para defender durante dos campañas los colores del Haugesund.

Alecko Eskandarian: Descendiente de armenios, el punta ya ganó fama a nivel nacional durante su etapa en el instituto. Una reputación que le acompañó hasta dar el salto a profesionalismo en el D.C United. Escribirían el resto de su currículum el Toronto FC, el Real Salt Lake, el Chivas USA y finalmente Los Ángeles Galaxy; donde coincidiría en la plantilla con David Beckham.

Freddy Adu: Era el más esperado, el deseado, el ansiado. Se le llegó incluso a bautizar como "El nuevo Pelé". Las marcas se rifaban su figura y en él estaban puestas todas las miradas. Se lo llevó el DC United a los catorce años y con el paso del tiempo se convirtió en el goleador más joven en la historia de la liga. Aumentó la locura y dio el salto a Europa. Tras pasar antes por el Real Salt Lake, le compró el Benfica y comenzaron los problemas. Sin minutos, encadenó cesiones. Primero en el Mónaco, luego en el Os Belenenses, más tarde en el Aris de Salónica y finalmente en el Rizespor turco. Cansado de hacer las maletas fichó por el Philadelphia Union, equipo que acabaría mandándole al Bahía brasileño en el que, según parece por algunas bases de datos, ha sido un viaje de ida y vuelta. Por cierto, cabe reseñar que en el año de su draft Clint Dempsey fue octavo y Michael Bradley trigésimo sexto.
Nikolas Besagno: Justo por delante de Brad Guzan se situó este centrocampista nacido en Maple Valley. Le adquirió el Real Salt Lake convirtiéndole, con dieciséis inviernos, en el segundo más joven que alcanzaba el número uno. Su trayectoria varía según las webs que se consulte. Lo único cierto es que ahora mismo entrena al equipo sub-18 de los Washington Crossfire.
Marvell Wynne: Una vez más el Metrostars volvió a ser el primero el elegir, esta vez en uno de los mejores drafts que se recuerdan gracias a una generación de la que salieron entre otros Yura Movsisyan (cuarto, Kansas City Wizards), Sacha Kljestan (quinto, Chicas USA) o Jozy Altidore (decimoséptimo, también Metrostars). El equipo de la gran manzana optó por este defensor que corría los cien metros en 10.39. Un activo que le ha permitido debutar con la absoluta y vestir también las camisetas del Toront FC y el Colorado Rapids, donde se encuentra ahora.

Por cuestiones personales no podré actualizar el blog durante el próximo viernes. Disculpad las molestias.

lunes, 20 de enero de 2014

El gigante dormido

 
Aunque resulta una teoría demasiado reduccionista, puede que detrás de la crisis que ha pasado el Tottenham se esconda algo tan simple como un gorro de lana. Esa era la prenda con la que se presentó Emanuel Adebayor a una charla de equipo, la misma que le hizo quitarse el técnico portugués André Vilas-Boas encontrando un "no" por respuesta. Después de aquél intercambio de pareceres, el togolés no volvió a tener oportunidades. 
 
Es probable que nada hubiera cambiado con él sobre el césped pero a juzgar por lo demostrado tras la destitución de su superior, la duda es más que razonable. El africano ha dado otro aire a sus compañeros asumiendo galones en un ataque donde Soldado aportaba más corazón y garra que acierto de cara a puerta, la única credencial válida para alguien de su condición.
 
Adebayor sonríe ahora después de mucho sufrir. La suya ha sido una carrera donde la muerte se ha cruzado varias veces llevándose por delante a sus seres más cercanos. Vio caer en un autobús a varios de los que se sentaban con él a la mesa durante las concentraciones de la selección nacional y, el pasado verano, tuvo que despedir a su hermano.
 
Una pérdida irreparable que le había sumido en una situación de desamparo y falta de motivación justo en el amanecer del curso. Puede que eso fuera la gasolina para desacreditar a su entrenador, que necesitaba imponerse en la batalla para ganar crédito ante un vestuario tocado y casi hundido. Sin justificar su actitud, quizás la psicología debió ganarle la partida a la autoridad. Un pequeño tirón de orejas y la fuerza del diálogo pueden ser en ocasiones más útiles que el castigo ejemplar.
 
Sea como fuere, la ilusión y la ambición vuelven a brillar en los ojos del "nueve"; recuperado para la causa por obra y gracia de Sherwood. Su estado de ánimo se refleja en el colectivo, algo que no es nuevo. Por lo general, siempre que Adebayor ha mostrado su cara amable en algún club, las cosas han funcionado. Todo lo contrario cuando asomaba su reverso tenebroso.
 
Atrás queda el que definió hace unos días como "el peor año" de su vida y se abre un porvenir esperanzador. Cada gol es una monodósis que 'engaña' al dolor, un motivo para pensar que lo peor quedó orillado y solo él puede reescribir su propia historia. Una pantera anda suelta y tiene más hambre que nunca.

viernes, 17 de enero de 2014

Hablando de fútbol con... Álvaro Rey (Toronto FC): "Incorporaciones como las de Bradley o Defoe ayudan a mejorarte a ti mismo"

Uno de los equipos de moda en este mercado de invierno es el Toronto FC, que se ha hecho con los servicios del estadounidense Michael Bradley y del inglés Jermain Defoe. Antes que ellos llegó allí un español, Álvaro Rey, futbolista salido de la cantera del Betis que también pasó por el Nástic de Tarragona y el Xerez.
Con la nueva temporada en la MLS a la vuelta de la esquina y antes de poner rumbo al oeste tras reponer fuerzas en su país natal nos atiende para hablar, entre otras cosas, de los que serán sus nuevos compañeros, de la experiencia que está viviendo en su club, de su día a día allí y del papel de su compatriota Benito Floro al frente de la selección nacional canadiense.

miércoles, 15 de enero de 2014

¿Qué ha sido de... Ebi Smolarek?

La heroicidad en Copa del Rey del maltrecho Racing de Santander me ha animado a dedicarle un pequeño homenaje en esta sección. Para ello he elegido la figura de uno de los extranjeros que llegaron con más cartel en una época donde la economía aún permitía gastarse más de cuatro millones de euros en una contratación.
 
Hijo del futbolista Wlodzimierz Smolarek, nació en Lodz aunque creció en Holanda debido a la profesión itinerante de su progenitor. De hecho fue en el sistema de formación del Feyenoord donde empezó a ganar cierto nombre hasta que dio el salto al primer equipo cuando tenía menos de veinte años.
 
Tras disfrutar de varias campañas en uno de los clubes punteros de los Países Bajos y en búsqueda de minutos, se marchó cedido con opción de compra al Borussia Dortmund. Debutó en la Bundesliga con gol ante el Wolfsburgo y siguió dejando buenas actuaciones, terminando su media temporada con dos dianas más y cuatro asistencias. La cifras convencieron a los germanos, que desembolsaron lo pedido para seguir contando con él.
 
Fue una gran inversión ya que la aportación ofensiva de Ebi no decayó, lo que le permitía seguir inflando su precio en el mercado. Ese fue el motivo del gran desembolso llevado a cabo por el Racing, donde rindió por debajo de las expectativas y comenzó a ser un problema por su excesiva ficha.
 
En esas circunstancias hubo que buscarle una salida y montarle en un avión con rumbo a Bolton esperando que la cesión fuera satisfactoria y el club inglés decidiera quedarse con él. No sucedió y, tras emprender el viaje de vuelta, el club español decidió que lo mejor era que cada uno siguiera su camino.
 
Para salir en ayuda de Smolarek, por el que se había interesado varias entidades, estaba el Kalava griego. La oferta le convenció si bien medio año después ya había roto el vínculo.
Decidió entonces jugar por primera vez como profesional en un club perteneciente a su país de nacimiento vistiendo los colores del Polonia Varsovia. Sin embargo su "caché" estaba por encima de lo que podían ofrecerle y acabaría emigrando en busca de más dinero.
 
La decisión le salió bien ya que ese sueldo que buscaba se lo ofreció el Al-Khor catarí. El vínculo le permitió juntar unos ahorrillos antes de intentar una nueva aventura en Europa. En búsqueda del tiempo perdido volvió a los orígenes y aceptó defender en Holanda los colores del ADO Den Haag. Fue una estancia de nueve meses antes de que en verano retornara a Polonia para pegarle patadas al balón en el Jagiellonia Bialystok. Actualmente, y tras no cuajar allí, se encuentra sin equipo.

lunes, 13 de enero de 2014

Camino a la perdición

 
Treinta puntos es la distancia que separa a la Juventus del Milán. Una cifra redonda, dolorosa y significativa de la situación de unos y otros. Bien es cierto que los de Turín atraviesan un excelente momento de forma en el campeonato italiano pero no lo es menos que los rossoneri son una sombra, probablemente la versión más pobre del equipo en lo que va de siglo XXI.

La derrota ayer contra el Sassuolo por 4-3 ha sido quizás el instante de máxima decadencia, ese que ha acabado definitivamente con Allegri, un técnico que para muchos ya ha disfrutado de un crédito tan excesivo como inmerecido a juzgar por la dinámica decadente y el desgaste que sufre la plantilla de un tiempo a esta parte.

Sin embargo señalarle como el único culpable es tan absurdo como contraproducente en el sentido de que es una solución fácil que solo enmascara otras carencias igual de graves. Por encima del resultado ante el recién ascendido, que llevaba cinco partidos sin marcar y en el que destacó el póker de goles firmado por el joven Berardi (ojo a este nombre), lo realmente preocupante es la actitud.

Los jugadores parecen arrastrarse cada partido por el campo como autómatas, practican un fútbol de oficina sin alicientes dando la sensación de que no disfrutan con su trabajo, que vestir su histórica camiseta es más un castigo que un privilegio. Es uno de los grandes problemas de contar con una plantilla avejentada donde solo nueve futbolistas cuentan con veintiséis años o menos, casi tantos como los que sobrepasan las tres décadas.

El dato invita a poner en cuestión la planificación deportiva, otro de los aspectos que no escapan de la crítica. Elemento esencial para construir todo proyecto, en el Milán es un ente abstracto desde hace tiempo. Con Berlusconi delegando en su hija Bárbara mientras sigue haciendo prestidigitación para eludir la cárcel y su fiel Galliani ejerciendo de factótum vitalicio, los fichajes parecen realizarse más por impulsos que atendiendo al raciocinio.

Así, teniendo a El Shaarawy lesionado, el futuro está en manos de un futbolista inestable como Mario Balotelli o en la más que improbable resurrección del brasileño Kaká, por mucho que esté sorprendiendo para bien desde su retorno. Además comprar en invierno se ha convertido en uno de los pasatiempos favoritos de un club que sigue agarrándose a la baza del populismo.

Solo de este modo se explica que con toda probabilidad el próximo inquilino del banquillo sea el holandés Clarence Seedorf, un hombre sin experiencia alguna como entrenador y que aún se desenvuelve como jugador a la espera de una llamada para dirigir a una de las entidades más importantes del mundo.
 
Una apuesta arriesgada que puede salir bien pero que a priori carece de sentido y resulta bastante ilustrativa de la deriva caótica del siete veces campeón de Europa. Sin cabeza, sin corazón, sin alma y sin orgullo todo es susceptible de empeorar. Toca cambiar el modelo de forma radical. Purgar, sufrir y renacer.

viernes, 10 de enero de 2014

Eusebio, de la A a la Z

Es costumbre en este blog elaborar un abecedario cada vez que la situación lo merece. La muerte hace menos de una semana de Eusebio, uno de los mejores futbolistas del siglo XX y un icono del deporte rey en Portugal, deja una obra importante que conviene repasar. Esta es, resumida en veintiséis puntos, su vida.
 
A- Ámsterdam: La ciudad holandesa tiene un significado especial en la carrera del atacante portugués. Pese a que jugó cuatro finales de la Copa de Europa fue allí donde conquistó la única que tenía en su haber, la de la temporada 1961-1962. El rival, un Real Madrid que aún contaba con nombres como Di Stefano, Puskas o Gento. Fue un partido vibrante que el Benfica comenzó perdiendo por 0-2 y que acabó venciendo por 5-3, con Eusebio anotando los dos últimos goles. Los lusos revalidaban así el título conseguido contra el Barcelona la campaña anterior, veinticuatro horas antes de que su estrella se pusiera la elástica roja por primera vez en un duelo oficial.

B- Benfica: La historia de uno de los clubes más importantes de Portugal no podría entenderse sin la figura de Eusebio, su icono máximo, su faro, su referente. El punta atesora todos los récords goleadores de la entidad y de hecho es el único jugador que ha sobrepasado las cuatrocientas dianas oficiales vistiendo la camiseta roja. Asimismo se encuentra entre los diez nombres con más partidos oficiales en el club y es el tercero con más apariciones europeas.

C- Cristiano Ronaldo: El futbolista del Real Madrid ha sido el encargado de recoger, muchos años después, el legado de Eusebio en Portugal. Convertido en el único, junto con Pauleta, que ha superado a este como goleador con la elástica nacional (disputando muchos más partidos, todo hay que decirlo) puede ser también el primer luso que conquiste dos "Balones de Oro". Las de ambos son dos épocas antagónicas, pasado y presente de un país que futbolísticamente sigue mirando al futuro.

D- Di Stefano: En una época en la que el respeto por el contrario era norma, ambos se profesaron admiración mutua. De hecho el delantero argentino fue uno de los primeros en referirse a él tras su muerte: "Juntos hicimos de una profesión una diversión. Es de lo mejor que he tenido como amigo", declaró. También llegaron palabras de alabanza de Pelé, Figo, Mourinho o Blatter entre otros al conocerse la noticia.

E- Estados Unidos: Más allá de Europa, el delantero hizo carrera en las Américas. A su fichaje por los Boston Minutemen le siguió una breve estancia en el Monterrey mexicano. Luego llegarían sus días con el Toronto Metros-Croatia (con quienes ganaría la NASL), Las Vegas Quicksilvers, los New Jersey Americans y finalmente los Buffalo Stallions; estos últimos de la liga indoor.

F- Funeral: Miles de portugueses salieron a las calles de Lisboa para despedirle con cánticos y darle su último adiós en la capilla ardiente instalada en el Estadio Da Luz, hogar del Benfica. La estatua levantada en su honor en las inmediaciones acabó cubierta de bufandas y se decretaron tres días de luto oficial. Sus restos ya descansan en el cementerio de Lumiar.

G- Guttman: El húngaro fue el primer técnico que tuvo Eusebio en el Benfica, el que dio el OK a su llegada. Juntos ganarían además la Copa de Europa. Eran años gloriosos que se truncaron cuando el club decidió no concederle a Guttman el aumento de sueldo que solicitaba. Enfadado, este se marchó asegurando que los portugueses no volverían a levantar un título europeo sin él. A día de hoy la maldición aún se cumple.

H- Hat-trick: Eusebio marcó tres goles en un partido varias veces en su carrera pero quizás una de las que más se recuerda es la del día de su debut. El Benfica se enfrentaba al Santos de Pelé en un amistoso y perdía por un resultado de 3-0. Entonces Guttman miró al banquillo y descubrió en el jugador que acababa de llegar a su revulsivo. En solo veinte minutos el atacante empató un partido que acabaría ganando el conjunto brasileño por 6-3. Cuentan que desde ese día "O Rei", quedó impresionado por las cualidades del portugués. Además volverían a enfrentarse de nuevo en la Intercontinental de 1962 y solo una lesión del brasileño impediría que jugaran uno contra otro en el Mundial de 1966. Ambos acabarían cultivando una buena amistad.

I- Inglaterra: El Mundial celebrado en aquél país durante 1966 ofrecería la que quizás fue la mejor versión de Eusebio. El portugués acabó como el máximo goleador del torneo con nueve tantos, un doblete contra Brasil incluido. Exceptuando el partido inaugural contra Hungría, vio portería en todos los demás y tiró de su equipo en los momentos bajos.
 
J- Juventus: Antes de que el Benfica se hiciera con sus servicios, otros clubes europeos ya había puesto sus ojos en la "Pantera negra". Uno de ellos fue el conjunto turinés, que llegó a realizar a su familia una oferta en firme para llevarlo a Italia. La negativa de la madre frenó una operación que podría haber cambiado la historia del fútbol. Años después habría otra intentona, pero el "no" esta vez lo dio el régimen portugués.

K- Kang Bong Chil: Este era el nombre de uno de los futbolistas norcoreanos que componían la selección en el Mundial del 66. Tras vencer de manera sorpresiva a Italia el seleccionado asiático se plantó en cuartos de final, donde les esperaba Portugal. En apenas 25 minutos la gran revelación del torneo ya ganaba 0-3 y soñaba de nuevo con una heroicidad. Sin embargo apareció Eusebio y todo cambió. Cuatro goles consecutivos de su puño y letra en apenas treinta y dos minutos le dieron la vuelta a la tortilla. La cifra le permitió lograr, además, el récord anotador en un duelo mundialista hasta la tarde gloriosa de Oleg Salenko contra Camerún en 1994. Portugal acabaría imponiéndose por 5-3.

L- Lisboa: La capital de Portugal, la ciudad del fado, la patria del Benfica y el lugar donde Eusebio dejó sus mejores tardes. Independientemente de los colores elegidos y por encima de las rivalidades, el atacante forma parte del corazón de todos los habitantes y de la historia de la urbe, que se queda huérfana de una de sus personalidades más representativas.

M- Mozambique: Aunque pasó la mayor parte de su vida ligado a Portugal y representó con orgullo al país ibérico a nivel internacional, Eusebio vino al mundo en este territorio africano y fue en su ciudad natal, Lourenço Marques -posteriormente Maputo- donde comenzó a dar las primeras patadas al balón. Finalmente acabaría viajando ultramar a cambio de 350.000 escudos.

N- Necesidad: Esta marcó su vida durante los primeros años. Alumbrado en el vecindario de Mafalala, el fútbol le ayudó a lidiar con la pobreza que le rodeaba. De hecho en él se refugiaba y a él acudía con recurrencia, saltándose las clases para montar partidos en campos improvisados y con pelotas fabricadas con trapos.

O- Oro: Eusebio acarició en varias ocasiones el más glorioso de los metales. Un "balón" (1965), que no volvería a levantar compatriota alguno hasta Luis Figo, y dos "botas" (1968 y 1973) son sus mayores éxitos a nivel individual. Además sería "Balón de Plata" en dos ocasiones (1962 y 1966) por detrás de Masopust y Charlton respectivamente.

P- Pantera negra: Durante su carrera Eusebio recibió varios sobrenombres, aunque el que más eco  tuvo fue el de "Pantera negra" gracias a su agilidad y a su velocidad, que le permitía correr los cien metros en apenas once segundos. Asimismo se le conoció como la "Pantera de Mozambique" o "La Perla Negra".

Q- Quíntuple: Cinco veces fue campeón de Copa con el Benfica. Logros que no fueron los más importantes de su trayectoria a nivel de clubes. A la ya mencionada Copa de Europa, sumó once títulos de Liga y hasta siete "pichichis". Tal fue el éxito que de las catorce temporadas que pasó en la entidad, solo en dos esta se fue de vacío. 

R- Ruth Malosso: Confirmado el interés del Benfica en hacerse con sus servicios, el jugador aterrizó en la capital en diciembre de 1960. Sin embargo para terminar de cerrar el traspasado quedaban flecos. Fue entonces cuando el club decidió mandarle durante varios meses al Algarve bajo este seudónimo para evitar que el Sporting de Portugal, enemigo histórico, se les adelantara.
 
S- Stepney: Este era el apellido del guardameta que defendía el arco del United durante la final de la Copa de Europa que midió a los "Diablos Rojos" con el Benfica en 1968. En un lance del juego, y con 1-1 en el marcador, Eusebio se quedó solo contra él. La intervención de Stepney desbarató un tanto que valía el título. El delantero, lejos de lamentar el fallo, aplaudió a su rival por el acierto.

T- Tétanos: Hijo de un matrimonio mestizo su padre Laurindo António Da Silva Ferreira era un trabajador del ferrocarril, blanco, que falleció debido a esta enfermedad cuando el jugador solo tenía ocho años. Le sacó pues adelante su madre Elisa Anissabeni, negra, junto al resto de sus hermanos.

U- Uniao Tomar: Este modesto club fue el último en el que Eusebio jugó en Portugal. Acompañado por su amigo Simoes, ambos iniciaron una aventura que duró cinco meses. Detrás de aquél proyecto se situó Fernando Mendes, un presidente que buscaba con aquella decisión darle más visibilidad a su equipo. Sin duda lo consiguió.

V- Vitoria de Setúbal: El debut en partido oficial de Eusebio no fue ni mucho menos el soñado. El Benfica se medía con los reservas al Vitoria de Setúbal veinticuatro horas después de levantar la Copa de Europa ante el Barcelona. Era un partido de vuelta de Copa que afrontaban con una ventaja de 3-1, pero el conjunto lisboeta acabaría apeado de la competición tras caer por 4-1. El delantero marcó el tanto visitante pero falló un penalti.

W- Wembley: Volvemos de nuevo al Mundial de 1966. Tras eliminar a Corea del Norte, el siguiente rival de Portugal fue la anfitriona, Inglaterra. Ambas selecciones midieron sus intereses sobre este mítico verde con victoria para los "locales" por 2-1. El partido acabaría conociéndose en tierras lusas como el "Jogo das lágrimas" por el llanto de su ídolo tras el pitido final después de que no pudiera realizar la mejor de sus actuaciones. Eusebio, que sí lograría allí el tercer puesto, regresaría años más tarde para disputar y perder una final de Copa de Europa ante el Manchester United.

X- XX: Eusebio quedará en el imaginario colectivo como uno de los mejores jugadores que se vieron durante el siglo XX. De hecho la Federación de Historia y Estadística del Fútbol (IFFHS por sus siglas) le nombró el noveno mejor en esos cien años por detrás de Pelé, Cruyff, Beckenbauer, Di Stefano, Maradona, Puskas, Platini y Garrincha.

Y- Yashin:  El fútbol es en gran parte imagen y una de las más utilizadas cuando se habla de la pantera negra es la de aquel penalti que le marcó a su némesis, la araña negra. Fue en el tercer y cuarto puesto del ya mencionado Mundial de 1966, donde los portugueses consiguieron el consuelo menor de la medalla de bronce.

Z- Zapatazos: Sin duda la principal virtud de este atacante era su velocidad pero había otra que le hacía diferente, su golpeo de balón. Eusebio pateaba con fuerza y precisión utilizando su pierna derecha, lo que le permitía no solo marcar goles en jugada sino también a balón parado; como lo demuestra el de falta que le hizo al Real Madrid en la final de la Copa de Europa. A todo ello añadía un interesante remate de cabeza y un físico privilegiado propio de un atleta.

miércoles, 8 de enero de 2014

¿Qué ha sido de... Marcelinho Paraíba?

Convertido en uno de los peores equipos capitalinos en lo que a las grandes ligas se refiere, el Hertha de Berlín tiene pocos motivos para sacar pecho por sus actuaciones. Eso sí, a comienzos del siglo XXI sufrió un pequeño repunte gracias a la conquista de dos Copas de la Liga en Alemania, un torneo ya extinto que sirvió como consuelo. Por aquél entonces ya se empezaba a ganar el corazón de la hinchada un futbolista brasileño que llamaba la atención no solo por sus habilidades sino también por el reiterado uso de tintes capilares.
 
Su nombre era Marcelo dos Santos aunque en el campo de batalla se hacía llamar "Marcelinho Paraíba" en honor a la región que le vio nacer y también crecer futbolísticamente ya que fue en el Campinense Clube donde comenzó a sonar con fuerza antes de dar el salto al estado de Sao Paulo. Allí, tras pasar por el Paraguaçuense le llegó su primera gran oportunidad, la de vestir la elástica del Santos de Pelé.
 
Fue un paso breve y con poca historia al que le siguió una experiencia en el Rio Branco y otra más en el Sao Paulo, donde comenzó a despertar el interés de algunos clubes de Europa. En esa puja por hacerse con sus servicios, ganó el Olympique de Marsella. Sin embargo no cumplió con las expectativas y tuvo que retornar a Brasil, jugando para el Gremio.
 
Comenzaron entonces sus mejores años. Pensando quizás en volver a Viejo Continente, Marcelinho dio lo mejor de sí con el conjunto de Portoalegre hasta el punto que la torcida le cambió el sobrenombre de "Paraíba" por el de "Paraúcho" en honor a los gaúchos. Adquirió de nuevo relevancia internacional y sedujo al Hertha para que desembolsara por él una interesante cifra.
 
La apuesta resultó acertada ya que su clase impulsó a los berlineses. Parecía una relación bien avenida pero el carácter de nuestro protagonista acabó saliendo a flote y tras desavenencias con la directiva, se marchó a Turquía para militar en el Trabzonspor. Fue un viaje de ida y vuelta ya que poco después regresaría a Alemania atendiendo a la llamada del Wolfsburgo, última experiencia lejos de casa.
 
Con treinta y tres años, el interés del Flamengo se revelaba atractivo y para allá que fue. Parecía un buen destino pero los continuos retrasos en los pagos le animaron a cambiar de idea y estampar su firma en un contrato con el Coritiba. No le fueron mejor las cosas ya que una vez más tuvo que plantar cara a los problemas económicos.
 
Decidió entonces darle una segunda oportunidad al Sao Paulo pero aquello no resultó. Sin la confianza del entrenador, acabó cedido en el Sport Recife, equipo por el que ficharía meses después. Tras subir con ellos, puso rumbo al Grêmio Barueri y al Boa Sporte, última parada antes de su llegada, hace menos de un mes, al Fortaleza.

viernes, 3 de enero de 2014

La agonía del Pompey

Desde hace años los palcos de Inglaterra se han convertido en una pasarela por la que han desfilado varias de las fortunas más boyantes del planeta. Hombres con el dinero por castigo y pocos escrúpulos a la hora de gastárselo en sus nuevos juguetes. Tal es así que algunos como el malayo Vincent Tan, propietario del Cardiff, han cambiado incluso los colores del uniforme de su equipo.
 
Los ha habido bueno, malos, peores... y luego todos los que le cayeron en desgracia al Portsmouth, que actualmente navega por la League Two plantando cara con la poca dignidad que le queda a una situación económica preocupante. Desde que se hiciera con la entidad el ruso con pasaporte israelí Alexandre Gaydamak, todo ha ido cuesta abajo.
 
Tras su marcha entró en escena Sulaiman Al-Fahim, al que el equipo apenas le duró días en las manos antes de traspasárselo a Ali al-Faraj, que lo adquirió gracias aun préstamo del hongkonés Balram Chainrai, que lo acabaría heredando cuando este falló en los pagos. El final del vodevil acabó cuando otro ruso, Vladimir Antonov, terminó de sepultar el cadáver al ser acusado el club por Hacienda de no pagar 1,6 millones de libras en impuestos.
 
El dinero se fue esfumando por el camino hasta crearse un agujero difícil de tapar y también los puntos, que se perdían fuera del campo en sanciones federativas. Hundidos y a la deriva bajo el timón de los administradores concursales naufragaron hasta la cuarta división. Solo quedaba el tiro de gracia para acabar con más de cien años de historia.
 
Sin embargo, en las situaciones más adversas es cuando de verdad se aprecia quién siente de verdad los colores. Un grupo de seguidores, el "Pompey Supportes trust" consiguió juntar la cantidad suficiente para hacerse cargo de las decisiones del club. Compraban un "producto" ruinoso pero su "producto", ese al que habían sido adictos desde la infancia.
 
La decisión ha permitido preservar el orgullo del escudo pero no el deportivo. Tras caer derrotados ante el Southend el día de Año Nuevo, los de Fratton Park solo suman seis puntos de los últimos treinta y tres ocupando la decimonovena posición a cuatro puntos del descenso a Conference National.
 
Es la triste realidad de un club que hace poco más de tres años y medio pisaba el santuario de Wembley para disputar la final de la FA Cup. La demostración de que a veces las promesas del nuevo rico se construyen con cimientos del grosor del papel de fumar. Un aviso a navegantes, aquellas inversiones en futuro fallidas salvadas con los ideales del pasado.

Aprovecho para dejaros un artículo que he escrito para Spherasports sobre algunos de los defensas más peculiares que han participado en los últimos cinco mundiales. Si lo buscáis, semanas atrás hice uno sobre los porteros. En breve podréis leer otros sobre centrocampistas, delanteros y seleccionadores. Os mantendré informados. http://www.spherasports.com/noticia/anecdotario_de_la_copa_del_mundo_ii_los_defensas#.UsccGP-A3IU