miércoles, 29 de febrero de 2012

¿Qué ha sido de... Oceano?



En primer lugar me gustaría pedir disculpas por romper mi rutina habitual y no escribir el pasado lunes. A veces las ocupaciones dejan poco tiempo para otras cosas y uno no tiene más remedio que priorizar y renunciar a escribir para evitar convertirlo en una imposición y que hacerlo acabe convirtiéndose en algo que genere hastío.

Dicho esto, me propongo acercaros hoy la figura de uno de los mejores mediocentros que jamás tuvo la selección portuguesa, el mejor futbolista de origen caboverdiano hasta la aparición del fenómeno Nani, que con sus bicicletas y sus virguerías ha conquistado un puesto elevado en el escalafón nacional actual solo por detrás de Cristiano Ronaldo.

En la previa del derbi vasco que se disputará este fin de semana sobre el césped de San Mamés, hablar de Oceano da Cruz parece lo adecuado en la medida en la que se ganó un hueco en el corazón de los hinchas easonenses por su temperamento y su carácter, unidos estos a su entrega y capacidad de sacrificio.

Nacido en Sao Vicente, emigró a Portugal durante su infancia en busca de una vida mejor que a la postre encontraría. Antes de que eso sucediera comenzó a foguearse en un club de menos nivel como el Almada. De allí daría su primer gran salto rumbo al Nacional de Madeira, donde resistió dos temporadas hasta que le llegó una oferta del Sporting de Portugal que no pudo rechazar.

No tardó en hacerse indiscutible y tampoco en vestir la elástica de su patria adoptiva, algo que lograría en la segunda de las siete campañas que disputó en el club capitalino. Allí se encontraba bien, se sentía realizado pero a como tantos otros le entraron las ganas de probar nuevas experiencias.

Se marchó así a San Sebastián acompañado de Carlos Xavier gracias a la capacidad de convicción de John Benjamin Toshack, que ya les conocía de su etapa en la liga lusa. Ambos se ganaron el cariño del respetable haciendo y deshaciendo en el centro de la cancha. Tal era el entendimiento que daban la sensación de no poder vivir el uno sin el otro. Por ello en el año 94, cuando se cumplían tres temporadas en España, decidieron regresar de nuevo al Sporting.

Fue en esa segunda etapa donde se rompió su entendimiento. Xavier participó mucho menos al contrario que Oceano, que demostró que podía ser una pieza fundamental allá donde fuera. De hecho entre sus dos estancias protagonizó más de 400 apariciones con los verdiblancos. Al final la edad le jugó una mala pasada y fue cortado por los lisboetas, que pensaron en darle el relevo generacional a alguien que ya sumaba 36 veranos.

Aún así aguantó un ejercicio más. Fue en el Toulouse francés donde, una vez más, se afianzó en el puesto retirándose por todo lo alto con más de cincuenta internacionalidades. Tras colgar la botas se centró en una nueva faceta como comentarista antes de recibir la llamada de la Federación para formar parte del staff técnico de Carlos Queiroz.

Llegó incluso a ser seleccionador sub-21 pero el fracaso en la fase de clasificación para la Eurocopa de 2011 precipitó su destitución. Finalmente decidió volver a ese lugar que podía llamar casa y hoy es asistente de Jose Couceiro en el banquillo del Jose Alvalade, donde están ansiosos por volver a recuperar unos laureles que parecen perdidos.

viernes, 24 de febrero de 2012

Donde caben dos, caben tres



En una campaña de sorpresas en lo que competiciones europeas se refiere, el Metalist Kharkiv está siendo el encargado de cubrir el cupo de forma más que digna en la Europa League. Es más, el club ucraniano linda ya con la candidatura a cotas más altas a juzgar por los guarismos que hablan en su nombre y que dicen que en su casillero no existe la palabra derrota. Seis victorias y dos empates, veintitrés goles a favor y siete en contra, son la carta de presentación en el torneo de una entidad de la que muchos han empezado a saber recientemente.

Probablemente la culpa de este olvido, de este ostracismo, no sea del propio Metallist sino de los equipos que le rodean en su país. El potencial mostrado tradicionalmente por el Dinamo de Kiev y últimamente por el Shakhtar Donetsk les ha relegado a un papel testimonial en su liga. En tierra de duopolio, nadie se acuerda del tercero.

Y sin embargo es a día de hoy el único que pasea el nombre del territorio por el Viejo Continente. En un año en el que Ucrania adquirirá relevancia internacional con la celebración de la Eurocopa, los dos grandes han fallado y tan solo este eterno desconocido da un poco de ánimo a la lalicaída afición patria.

Una responsabilidad que de momento manejan sin presión. Son los otros los que han fracasado, no ellos. Con su brillante y contundente clasificación para octavos de final ya han alcanzado su tope en la extinta UEFA, la misma gesta cosechada en la 2008-2009 cuando se colaron entre los dieciséis mejores y fueron despertados del sueño por sus compatriotas capitalinos.

Se confirma pues la trayectoria ascendente de un proyecto que tiene, como casi todos en Europa del Este, a un mecenas. Su nombre es Olksandr Yaroslavsky y es una de las fortunas más grandes del país oficiosamente gracias al éxito en el campo de la construcción de su empresa DCH, adjudicataria entre otras cosas de la remodelación del aeropuerto de la ciudad, la segunda más grande del país y como curiosidad la que tiene la novena plaza (Plóshchad Svobody o de la libertad) más extensa del mundo.

Desde que llegara en 2004 con el dinero fresco y el equipo recién ascendido, su inyección económica ha llevado al Metalist a ocupar el tercer escalón del podio en la UPL durante cinco temporadas consecutivas por delante del emergente Dnipro, que finalmente parece quedarse en un quiero y no puedo.

La estrategia para lograrlo ha sido sencilla. Coger ideas que le han funcionado a los demás y sustentarlas con una arcas sólidas. De esta forma no hay grandes diferencias entre el modelo primigenio del Shakhtar y el que hoy presenta nuestro protagonista. Un importante bloque de jugadores sin especial renombre procedentes de una nación sudamericana (en este caso argentinos) complementados con un par de futbolistas con clase, todo ello edificado principalmente en el verano de 2010 con una inversión de casi veintitrés millones de euros.

Al frente del vestuario un hombre que conoce la casa como la palma de su mano. Miron Markevich, en el cargo desde el año 2005, ha conseguido afianzar al club en el lugar que debe, agazapado al acecho de los dos gigantes dormidos y situando al fin en el mapa a una localidad tradicionalmente defenestrada.

Con un estadio completamente remozado que será sede en la Euro del llamado "grupo de la muerte" y albergará los tres partidos de Holanda ante Dinamarca, Portugal y Alemania; sin duda 2012 está llamado a ser el año que les ponga en su sitio, el que les sirva de escaparate para que nadie más se olvide de su existencia. Como decía aquél anuncio de Ikea: "Donde caben dos, caben tres".

miércoles, 22 de febrero de 2012

¿Qué ha sido de... Vikash Dhorasoo?



Leía el otro día acerca de la creación de la liga india, que ha decidido importar algunas estrellas ya en el ocaso de su carrera para intentar atraer a un público virgen balompédicamente hacia los estadios. Pensaba entonces en jugadores que hubieran nacido en aquél país y descubría con resignación que no había demasiados. La referencia más cercana que encontré fue la de nuestro protagonista, uno de los futbolistas más talentosos de su generación y que gracias a los orígenes de su padre es, junto a Aaron Winter, el único jugador de esa ascendencia en disputar un Mundial

De hecho a pesar de que él nació en Francia, sus raíces proceden de otras partes del mundo. Dhorasoo fue a caer en el país galo como retoño del matrimonio que su padre mantuvo con una con una mauriciana después de que sus antepasados se trasladaran en busca de nuevas oportunidades a esta pequeña isla situada a 900 kilómetros de Madagascar.

En un núcleo familiar acostumbrado a los movimientos migratorios y a los viajes transoceánicos era casi previsible que viera la luz en una ciudad con puerto. La elegida fue Harfleur, la más importante en este campo dentro del noroeste del país hasta la creación de Le Havre, que se encargó de fagocitarla y convertirla en un pueblo de extrarradio. El mismo pueblo de menos de 10.000 habitantes en el que posteriormente también sería alumbrado Charles Nzogbia.

Por todo ello no os sorprenderá que sus primeros pasos como profesional los diera en "Le club doyen", donde estuvo hasta los 25 años, momento en el que fue reclutado por el Olympique de Lyon, que entonces apenas era considerado un equipo emergente. Con él y otros futbolistas llegó el salto de calidad definitivo que convertiría al club en un ente dictatorial en lo que a títulos nacionales se refiere.

Sin embargo, de las siete ligas conquistadas de forma consecutiva solo pudo levantar dos. Cuando se consiguió la primera se desenvolvía como cedido en el Girondins y para cuando llegó la cuarta se había encargado de echarle el lazo el Milán aprovechando sus desavenencias con Le Guen. Su primera experiencia en Italia fue bastante decepcionante y aunque conquistó una medalla de subcampeón de Europa (fue triste protagonista de la remontada del Liverpool) apenas tardó un verano en regresar a su patria.

Lo hizo para enfundarse la camiseta del PSG. Necesitaba recuperar el tiempo perdido y lo hizo a pasos agigantados con actuaciones portentosas que le valieron para disputar la Copa del Mundo de 2006. Aquél torneo sería el último en el que representaría a su nación entre otras cosas porque, a pesar de voces como la del seleccionador Domenech que le recomendó no hacerlo, decidió publicar un documental titulado "Substitute" y grabado por él mismo durante el mes de concentración.

Fueron sus días de furia ya que a la vuelta de aquél incidente se permitió poner a parir a su entrenador Guy Lacombre en una entrevista concedida al diario L'Equipe, lo que le convirtió en el primer pelotero despedido por un club francés desde el año 1973. Esos comportamientos le cerraron las puertas de entidades punteras y se pasó casi un año en el dique seco.

Fue entonces cuando decidió acudir en su rescate el Livorno. En un principio aceptó la oferta pero no llegó a debutar ofendido porque, en buena lógica, le dijeron que primero debería entrenar con el primavera para valorar su estado físico. Finalizado aquél viaje y tras rechazar alguna que otra propuesta, se retiró y se dedicó a otros placeres de la vida.

Tras actuar en una película se propuso, sin éxito, ser presidente del Le Havre. Como ese capricho se frustró decidió trasladar sus intenciones al L'Entente Sannois Saint-Gratien, un club amateur. Por supuesto esa actividad no ocupa todo su tiempo libre, si es que se puede decir que tiene de eso.

Defensor de las causas sociales y también del socialismo patrocina a un club, el Paris Foot Gay, que lucha contra la homofobia al tiempo que ha mostrado su recelo hacia Sarkozy apoyando primero a Ségolène Royale y últimamente a François Hollande. Se puede decir de hecho que le gusta estar cerca del poder pues también intentó, sin éxito, entrar en una candidatura para la presidencia de la Federación de Fútbol.

Y por si fuera poco también ha colaborado estos últimos años con varios medios de comunicación... y juega al póker. Y según cuentan bastante bien, hasta el punto de que ha sacado jugosas tajadas en partidas a lo largo del globo. Un tipo peculiar al que definieron en su día como "el jugador de fútbol de la melancolía".

lunes, 20 de febrero de 2012

Totti per tutti

La placa con la que ayer se premiaba a Francesco Totti por sus 700 partidos oficiales era modesta, más bien discreta, muy acorde con el agasajado. Si el estandarte romano hubiese preferido el lujo, el glamour o levantar títulos de los que le hacen a uno entrar en la historia probablemente habría hecho las maletas hace tiempo.

Sin embargo ahí sigue, paseando su figura por el Olímpico de Roma. Con su aspecto de gladiador sin duda fue puesto en el mundo para ser eterno en la ciudad eterna, para convertirse en un patrimonio capitalino tan emblemático como el Coliseo o la Fontana di Trevi, para pasear por el globo a Rómulo y Remo, amamantados en el escudo de la entidad a la que le ha dado todo.

Y es que a fin de cuentas el séptimo centenar de batallas no deja de ser algo anecdótico en una carrera que comenzó el 28 de marzo de 1993 cuando Vujadin Boskov decidió darle la alternativa con tan solo 16 años en un partido contra el Brescia (a día de hoy es el séptimo pelotero más joven en disputar un partido de la Serie A). El serbio, que de esto sabía un rato, vio en él un diamante en bruto que no se atisbaba con anterioridad, cuando el púber Totti ejercía como monaguillo y le rezaba a Dios para que le hiciera crecer mientras en el barrio le llamaban "Gnomo".

Hoy, convertido en un hombre, en un símbolo, puede mirar hacia atrás con orgullo. Tras recoger de las manos del mítico Aldair el brazalete de capitán, su club y él pueden decir alto y claro que la vinculación ha sido inmejorable. Él le ha dado la relevancia internacional que necesitaban (la IFFHS le reconoció en 2011 como el futbolista más popular de Europa), les ha guiado a la conquista de su primer Scudetto en 19 años, les ha prestado su imagen y ha llenado las redes con sus goles.

La Roma no sería lo que es hoy sin Totti, un tipo que renunció a todo tipo de aspiración personal por hacer historia en el equipo de su ciudad. De esos que venden su alma a una sola hinchada, que visten su cuerpo con un único uniforme, que buscan ligar su leyenda a la de un himno. Todos los records son suyos: Es el futbolista con más partidos, también el que más veces ha visto portería. Cifras estas extrapolables al Calcio en general.

Totti es a día de hoy el futbolista que más goles a metido con un único conjunto y solo necesita cinco para coronarse como el tercer máximo anotador en la historia de la Serie A superando al mito Giuseppe Meazza y mirando de cerca (necesita quince) a Gunnar Nordahl, otro que también vistió el granate aunque este en sus últimos años procedente del Milán.

Y todo ello con la humildad del chico que un día quiso trabajar en una gasolinera, de aquél que reconoce no haber podido de leer un libro más allá de "El principito", de alguien capaz de reirse de sí mismo editando un libro con los mejores chistes sobre su persona y donando todos los beneficios a UNICEF.

Con su acento romanesco, su facciones duras, Totti es el jugador del pueblo, ese bregador al que todos sus paisanos querrían parecerse. Su ocaso está cada vez más cerca. Él lo sabe y lo espera reposado, tranquilo, a fuego lento. Con todo lo logrado puede tener la conciencia muy tranquila. El fútbol ya tiene para él un lugar en el Olimpo.

jueves, 16 de febrero de 2012

Zambia escribe su "historia de África"

Cuando Kalusha Bwalya, cuya historia ya hemos contado en este blog, levantaba el pasado domingo la Copa África, una bomba de emociones se activaba dentro de él. Allí estaba, llevando al cielo el trofeo de campeón continental en Gabón, el mismo país donde perdieron la vida en trágico accidente de avión todos sus compañeros en la que era, hasta el momento, la generación más brillante de Zambia.

Junto a él los hombres que obraron el milagro. En un plano menos protagónico Hervé Renard, ese hombre serio que irradió confianza durante todo el torneo, con un aspecto físico y unas poses más propias de una pasarela que las que se esperan de un técnico en las batallas que se libran sobre los térreos céspedes africanos.

La mezcolanza de historias personales era digna de un cuadro, de una película hollywoodiense. Leía el otro día en una entrevista a Héctor Alterio en la revista "Panenka" que la mejor película de fútbol aún está por escribirse. He aquí un buen guión. Brad Pitt como Renard, Morgan Freeman en el papel de Bwalya, Denzel Washington más contundente y con las facciones más duras en la piel de Katongo... y todo desde el punto de vista de uno de esos directores capaces de conmover con sus relatos humanos.

Porque la humanidad es lo que convierte este milagro en diferente. Un superviviente que no viajaba en un avión siniestrado tras quedarse en casa por lesión y que se obsesionó con reconstruir el país futbolísticamente hablando primero como seleccionador y luego como presidente.

Una plantilla sin aspiraciones que llegaba como víctima propiciatoria y que poco a poco fue creyendo en sí misma. Que sabía que solo podría volver a Gabón si llegaba a la final. Que celebraba todos sus goles en una piña, bailando alegremente y con una sempiterna sonrisa en el rostro.

Un director de orquesta que, tras abandonar en un primer momento al equipo escuchando los cantos de sirena de Angola, volvió para terminar el trabajo empezado. Un tipo de rostro serio que apelaba al corazón de los suyos, que había deambulado por las categorías más bajas del fútbol galo y había aceptado ser segundo en China.

Si bien en otros torneos no siempre se recuerda al campeón sino al que mejor fútbol practicó o al futbolista que se dio a conocer al mundo, en este caso no queda duda. Incluso si el sueño finalmente no se hubiera cumplido, la victoria previsible de Costa de Marfil habría quedado en ancdótica.

Los "elefantes" son sin duda los grandes derrotados de esta edición. Ausentes Egipto y Camerún y solo con Ghana en el horizonte, este parecía ser su año gracias al potencial ofensivo y a la solidez que estaban demostrando en la zaga, algo poco habitual en territorio africano. Sin embargo los penaltis volvieron a castigarles con crueldad.

Una pena máxima que también tuvo que pagar uno de los mejores futbolistas del torneo, sin duda el jugador revelación. Tras comenzar su carrera dando palos de ciego, Aubameyang, travestido físicamente de Neymar, eligió su casa como el mejor escenario posible para gritarle al mundo que vale para el negocio.

Él y su combinado llegaron a cuartos al igual que Guinea Ecuatorial, el otro anfitrión. Con un plantel repleto de jugadores procedentes de las categorías más modestas del fútbol español, se sobrepusieron a una situación convulsa tras el despido de Metsu y lejos de dejar su casillero a cero terminaron como segundos de grupo por detrás del campeón y solo pudieron ser apeados por el finalista. Actuación sin duda más que digna.

Algo que no pueden decir un combinado que hizo uno de los ridículos más espantosos que se recuerdan en la Copa África. Senegal llegaba como una de las alternativas y se marchó sin un solo punto, lamentable cifra a la altura de Níger, Botsuana y Burkina Faso. Con una delantera que asustaba, todos pensaron más en sus clubes que en la elástica nacional.

En un escalón por encima de lo penoso de Senegal pero con un suspenso en las notas igualmente, estuvo Marruecos. Con ellos quedó demostrado que tener técnica sirve de poco si no se arrima el hombro. En los momentos clave de los partidos importantes sus jugadores no tuvieron la solidez suficiente y acabaron cayendo a las primeras de cambio. Aún queda trabajo por hacer.

Por lo demás, lamentar que una vez más la fiesta se tornó en luto como sucediera en Angola. En aquella ocasión fue el atentado contra la expedición de Togo. Esta vez el drama acontecido en un estadio egipcio, a kilómetros de distancia pero contemporáneo a la cita. Ojalá que el año que viene (a partir de ahora se jugará los años impares y para cambiar el ciclo hay que repetir) en Sudáfrica no haya que hablar de hechos luctuosos y sí del deporte rey, que cada vez es más grande en África.

miércoles, 15 de febrero de 2012

¿Qué ha sido de... Ndaye Mulamba?

Os llevaba anunciando desde hace un par de semanas una buena historia. La de un hombre que es el máximo goleador en una edición de la Copa África. La de un tipo que fue disparado en una pierna, que vivió como refugiado en la miseria, al que se dio por muerto, que ha sido protagonista de un documental... La historia de Ndaye Mulamba.

Alumbrado en la República Democrática del Congo cuando el territorio aún llevaba el extinto nombre de Zaire y Kananga, la ciudad que le vio nacer, aparecía en los mapas como Luluabourg; su vida ha estado sometida a cambios constantes y se ha desarrollado paralelamente a la de su país.

En las calles, como tantos otros futbolistas de su continente, empezó a forjar su leyenda. Allí jugaba y allí aprendía a marchas forzadas de forma virtuosa, hasta tal punto que con quince años ya fue reclutado para el profesionalismo por el Renaissance du Kasai. Ni siquiera en su primer partido se amedrentó y con dos goles en el clásico frente al Union Saint-Gilloise comenzó a escribir su leyenda.

Ese éxito prematuro no era comprendido, en cambio, en su propia casa. De no ser por su constancia quizás la historia habría perdido a un excelente jugador ofensivo y hubiera ganado un profesor, el trabajo que su padre quería para él. De hecho llegó a ejercer durante unos años hasta que decidió que lo suyo era pegarle patadas al balón, una decisión en la que influyó ser preseleccionado por su país de cara a la disputa de la Copa África del 68.

Finalmente no viajó a aquella cita, pero con esa camiseta acabaría escribiendo grandes gestas igualmente. Antes cambiaría de club para firmar por AS Bantous, de la localidad de Mbuji-Mayi, y un año después por el AS Vita Club. Por entonces corría 1973 y sin saberlo, se abría ante él su gran escaparate.

El triunfo en la máxima competición continental al final de ese ejercicio le permitió representar a su nación en la Copa África de 1974, donde llegaron como una de las "cenicientas". Con solo ocho equipos en liza distribuidos en dos grupos, quedaron segundos en el A por detrás del Congo Brazzaville y por delante del Guinea y Mauricio.

Su rival en semifinales fue Egipto, los anfitriones. Los locales se pusieron dos goles arriba pero la casta de los zaireños, abanderados por el bigoleador Mulamba, fue la gasolina necesaria para realizar la remontada. Con el sueño de disputar la final ya cumplido, Zaire era el último combinado que les impedía alcanzar la gloria.

Los "leopardos" se pusieron por detrás en el marcador y de nuevo tuvo que venir nuestro protagonista a sacar las castañas del fuego. Marcó el empate y puso el 2-1 en el minuto 117. Con todo prácticamente hecho un tanto de Sinyangwe en tiempo de descuento forzó la disputa de un replay dos días después. Aquél partido lo ganó Zaire por 2-0... con doblete de Mulamba. Así pues eran los campeones y el atacante, recórdman con nueve dianas.

Aquél logro hizo que el presidente Mobutu Sese Seko les prometiera una cantidad económica como recompensa. Al final, el único que recibió algo fue el punta, al que le otorgaron la "Orden de la nación", máxima distinción para alguien nacido en el país. Del dinero no se supo nada y, teniendo en cuenta la precariedad económica, no es algo que le hizo mucha gracia a los jugadores.

Ese descontento se demostraría sobre el césped precisamente en el peor escenario posible, el Mundial de Alemania. La ilusión por hacer un buen papel en la primera incursión de un equipo subsahariano en la competición chocó con ese desengaño cuajándose en una derrota por 9-0 frente a Serbia. Ese choque además acabó con la expulsión de Mulamba tras confundirle el árbitros con otro jugador. Tras no haberse dejado ver en los primeros noventa minutos contra Escocia y no participar contra Brasil en el tercer partido, su imagen pasó sin pena ni gloria. ¿Sus recuerdos de aquello? Cuando la gente se acercaba a fotografiarse con ellos porque nunca habían visto a un negro.

Después nada volvió a ser lo mismo. Las lesiones hicieron mella en él y solo en 1981 volvió a acariciar la gloria, cuando llevó al Vita a la final de la Champions africana. Su equipo cayó ante el Kabilye argelino, él se retiró y entonces comenzó su dramática vida fuera de los terrenos de juego.

Olvidado por todos los estamentos de su país, el único reconocimiento lo recibió de fuera. Fue en la Copa África de 1994 celebrada en Túnez. Hasta allí viajo para recoger un reconocimiento y aquella fue a la postre una trágica decisión. A su vuelta, fue abordado por un grupo (se ha dicho incluso que a cargo de Mobutu) que le identificaron e intentaron robarle. En medio de la tensión del momento, fue disparado en una pierna y a punto estuvo de sufrir la amputación del miembro.

No sería la única desgracia que sufriría en un corto periodo de tiempo. Poco más de dos años después, en medio de la guerra civil, su hijo fue asesinado y decidió viajar a Sudáfrica como refugiado político. Por entonces sufría además problemas de alcoholismo por lo que su adaptación no fue buena. Sin dinero se desplazó desde Johannesburgo hasta Ciudad del Cabo, donde fue acogido por una familia.

Diluido en el anonimato, a "Volvo" (como así se le conocía) se le guardó incluso un minuto de silencio durante la Copa África de 1998 celebrada en Burkina Faso al creerle muerto en un accidente acontecido en una mina de Angola. Él, en la sombra, seguía sobreviviendo y mandando dinero a su mujer hasta que esta falleció de cáncer en el 2008.

Su preocupante situación, que llevó incluso a trabajar como vigilante de coches a cambio de las limosnas de los conductores, llamó la atención de un director, que grabó un documental sobre su vida titulado "Oro olvidado" (os dejo el trailer enlazado abajo). Sin haber salido de Sudáfrica, parece que poco a poco todo ha ido reconduciéndose. Ha conocido a una nueva mujer y ahora trabaja entrenando a niños. Sin embargo sigue lamentando el trato recibido.

"En África los héroes son lo que nosotros hacemos de ellos. Durante tus días de gloria te aúpan a los cielos. Luego, cuando dejas de estar en lo más alto se olvidan de ti, te rechazan. La historia de África podría escribirse en esos términos".

http://www.youtube.com/watch?v=OeVAe6nqWYc

lunes, 13 de febrero de 2012

Alegría conflictiva

Es evidente que la noticia del fin de semana en el fútbol internacional es el triunfo de Zambia en la Copa África, un milagro con el que nadie contaba al principio del torneo y que lo dignifica aún más si cabe. Sin embargo una vez más las limitaciones de tiempo me impiden analizar con detalle todo lo que ha rodeado a este fenómeno. Lo haré en un futuro próximo pero hoy me quiero centrar en otro detalle de la jornada, las lamentables imágenes surgidas durante el reencuentro de Evra y Luis Suárez.

Cabe recordar que el uruguayo había sido sancionado con ocho partidos en un pasado muy reciente por verter insultos racistas contra el francés. Lejos de retractarse, el futbolista del Liverpool se negó a saludar al lateral en el comienzo del partido, algo que este le afeó. Posteriormente, en caliente, el lateral del Manchester se tomó cumplida venganza celebrando en las narices del punta la victoria por 2-1. He aquí las imágenes, que supongo que ya habréis visto.
http://www.youtube.com/watch?v=nu5WGPdMcWU
http://www.youtube.com/watch?v=RqIjFDB0vcE&feature=related

Suárez ha pedido perdón por su lamentable gesto pero todo lo sucedido ha dado la vuelta al mundo, incluido el festejo de Evra. En este último fotograma me detengo para tratar un tema que considero peculiar, el de las celebraciones polémicas. He aquí una lista con las más sonadas a lo largo de la historia.

Van Nistelrooy planta cara a Andorra: La historia venía de minutos atrás. El punta holandés fallaba un penalti ante el modesto combinado y uno de los futbolistas rivales se mofaba de ello. La venganza, un plato que se sirve frío, llegó a continuación cuando el tulipán cazaba un balón dentro del área y lo acompañaba a la red.
http://www.youtube.com/watch?v=pvAU1Sc0JHE&feature=related

Las butifarras: En el puente aéreo que une Madrid con Barcelona han aflorado alguna vez las famosas butifarras. No son las únicas celebraciones conflictivas en un clásico (a continuación va otra) pero hasta en dos ocasiones se han llegado a presenciar merced a Schuster y Giovanni, tres si contamos las que hizo Van Bommel, ex azulgrana, con la camiseta del Bayern en el Bernabeu.
http://www.youtube.com/watch?v=COIMF7QCYNg
http://www.youtube.com/watch?v=cVa6jm2Ta5c
http://www.youtube.com/watch?v=Ja5rtAwqXdw

Raúl pide silencio: Es otra de las imágenes de los duelos entre Barcelona y Real Madrid. El Camp Nou es el escenario y el protagonista, Raúl, un futbolista poco dado a las polémicas. La fotografía ha quedado como icónica para muchos aficionados merengues por el contexto en el que fue tomada.
http://www.youtube.com/watch?v=kToAy-bW5K0&feature=fvst

¡A las armas!: De un tiempo a esta parte se han vuelto tristemente famosos esos fastos en los que las armas de fuego son las protagonistas. En España el "suicidio" de Chevantón tras ver puerta contra el Real Madrid escandalizó a algunos, pero nada comparable a lo que sucedió en México (un país donde la violencia ocupa más lugar en los periódicos del que debería) con Marco Fabián.
http://www.youtube.com/watch?v=97bsi7ljttc
http://www.youtube.com/watch?v=bJztmLircgQ

Las cosas de Cahuatémoc: No salgo de México para hablar de uno de los futbolistas más venerados por la hinchada azteca. Tan genial como conflictivo, ha dejado varios momentos para la hemeroteca. Uno fue el "perrito" que también hizo en su día el jugador del Valencia, Leandro, en el Vicente Calderón (lamento deciros que no hay imágenes en movimiento). El otro, su acto de osadía ante Lavolpe cuando este era entrenador del Atlas, una acción que le costaría cara pues el técnico se tomaría su revancha no convocándole cuando fue seleccionador.
http://www.youtube.com/watch?v=LFUwj6OpnwQ
http://www.youtube.com/watch?v=wR0sSXO0dJ0

Sprints con mala intención: Carreras semejantes a la que se hecho Blanco en el vídeo anterior se han visto un par de veces en la Premier League. Más corta pero más intensa fue la de Neville para dirigirse a la grada del Livepool (de nuevo los mismos equipos protagonistas de este fin de semana). Más larga la de Adebayor, que se recorrió el campo de punta a punta para mandarle un recadito a los aficionados del Arsenal.
http://www.youtube.com/watch?v=KJF71ufqZqc&feature=related
http://www.youtube.com/watch?v=QubF5Afcuek

Duelo de gallitos en la Bundesliga: Tampoco se cortó a la hora del festejo Nuri Sahin tras marcar ante el Colonia. Podolski comenzó a vacilar al turco tras un gol y caldeó los ánimos. Lejos de dejarlo en anécdota, el alemán realizó minutos después una entrada de tarjeta roja que se quedó en amarilla para ambos. Al final sucedió lo habitual en estas situaciones, que se acaban volviendo contra el que las crea.
http://www.youtube.com/watch?v=8TkyDFlMDOs

Dos polos opuestos: Lucarelli y Di Canio han sido en el Calcio la noche y el día con una única cosa en común, las redes entre ceja y ceja. Comunista uno, fascista el otro, no han dudado en llevar la política al terreno de juego.
http://www.youtube.com/watch?v=QHZ5gyXVwSU
http://www.youtube.com/watch?v=emOnwu89kns (desde el minuto 1.00)

Sin embargo, refiriéndonos a Lucarelli, aún hay otra celebración que no paso desapercibida, esa en la que escenificó un coito con la camiseta del Livorno.
http://www.youtube.com/watch?v=7Je4O7IbSOY

También los entrenadores: Conviene aclarar que este tipo de circunstancias no son competencia exclusiva de los jugadores. Los técnicos, que también están sometidos a mucha presión, explotan de vez en cuando. Mourinho es un clásico en estas lides pero el momento más visual lo dejó Souness cuando, tras levantar una copa con el Galatasaray en el campo del Fenerbache decidió plantar una bandera de los primeros en el círculo central.
http://www.youtube.com/watch?v=NVT-NK_c6LU
http://www.youtube.com/watch?v=-VR6zNH7lqc

Robbie Fowler y la línea de cal: Esta quizás sea una de las que más sensibilidades ha herido en la historia del fútbol. La afición del Everton difundió el rumor de que el delantero era cocainómano y este decidió tomarse la justicia por su mano e ironizar sobre el asunto... de forma errónea. Aún le persigue esa leyenda, como confesaba hace unos meses en una entrevista concedida a la recomendable revista "Panenka", y aún sigue respondiendo a sus críticos: "El otro día hubo un tío en Twitter que me tocó las narices con lo de la coca. Si no le contestas da la sensación de que ha ganado así que le respondí que venía de hacerme dos rayas en casa de su madre".
http://www.youtube.com/watch?v=IYEMa465re0

jueves, 9 de febrero de 2012

¿Qué ha sido de...Catanha?

Tenía pensado contaros la historia que tenía pendiente el miércoles pasado y cuyo relato tuve que posponer como consecuencia de los horribles sucesos acontecidos en Egipto durante la disputa del un partido de fútbol. Sin embargo, lo confieso, ha sido un día duro y prefiero escribirla otro día con más calma porque creo que merece la pena.

En lugar de ese protagonista, menos conocido pero realmente interesante, os acerco la historia de otro mucho más cercano que consiguió hacerse un hueco en nuestra liga a base de esfuerzo, que progresó desde segunda hasta la selección española antes de seguir el camino inverso y bajar los escalones que había subido.

Henrique Guedes da Silva nació en la localidad de Recife, la capital del estado occidental de Pernambuco. En una de las ciudades más grandes de Brasil, a él le tocó vivir la realidad más dura, la de los barrios humildes. Sin dinero pero con un balón, como tantos otros, fue desarrollando sus habilidades en ese fútbol de porterías improvisadas que busca la diversión como escape de los problemas.

Las buenas maneras que apuntaba le permitieron dar un paso más y desplazarse a Río de Janeiro para ingresar en las inferiores del Fluminense. Nunca llegaría a debutar y se vería obligado a probar suerte en otro club, el Sao Cristovao. Hubiera quedado en anécdota si no fuera porque allí coincidió un par de semanas con Ronaldo, que por entonces apenas contaba con quince primaveras.

Apodado, en su etapa como pelotero del Flu, con el nombre de un cangrejo autóctono del estado de Río de Janeiro en su siguiente aventura de desplazaría un año a otra gran urbe como es Sao Paulo para enfundarse la camiseta del Uniao Sao Joao. Como quiera que aquello no salió como esperaba, hizo las maletas rumbo al Centro Sportivo Alagoano, entidad radicada en Maceió.

Máximo goelador de la liga local en su segunda campaña, fueron sus actuaciones allí las que le valieron como carta de presentación para viajar a Europa no sin antes recalar en el Paysandú de la primera brasileña. Por cuestión de idioma, algo que siempre facilita la adaptación, entró por Portugal de la mano del Os Belenense. No triunfó y, en una época en la que el Salamanca se obsesionó con traerse a gente de tierras lusas (junto a él vino Giovanella y ambos se unieron a nombres como Taira, Pauleta o César Brito) se desplazó sin pena ni gloria a Castilla y León.

Una cesión en el Leganés fue la siguiente piedra en su trayecto. Sus cifras mejoraron y llamó la atención del Málaga, que se encontraba en segunda. Se conoce que el sol le sentó bien pues fue en Andalucía donde comenzó su ascenso hacia el clímax. En su primer curso logró el ascenso cornándose como máximo goleador. En el segundo, ya entre los más grandes, compartió el segundo puesto del pichichi junto a Hasselbaink, solo por detrás de Salva.

Por ello el Celta le convirtió en el fichaje más caro de su historia al desembolsar 2,3 millones de euros. Fue dejándose ver en ese buen escaparate cuando le llegó la gran oportunidad de su vida, enfundarse la camiseta de la selección. Fueron tres partido (contra Israel, Austria y un amistoso contra Holanda) en los que le valió para convivir con aquél combinado. Con el tiempo, justo antes del Mundial, defendería en una entrevista que la decisión de apartar a Raúl del combinado nacional era a su entender acertada.

Tras enfundarse "La Roja" no volvió a ser el mismo. Se contagió de la mala dinámica de los celestes y juntos se fueron a la división de plata. Los gallegos necesitaban vender y por ello le traspasaron con 31 años al Krylia Sovetov Samara. No funcionó y tuvo que hacer parada en Os Belenenses antes de regresar a España.

Quizás pudiera haber aceptado otra cosa pero estaba dispuesto a seguir disfrutando con el fútbol. Por ello renunció a más dinero para formar parte de un proyecto interesante como era del Linares. Lo que parecía un sueño se tornó en pesadilla y cuando los problemas económicos arreciaron puso rumbo al Unión Estepona, al que llevó de tercera a Segunda B. Con el objetivo cumplido, regresó a Brasil, a sus orígenes. Hoy se encuentra de nuevo en el Clube Sportivo Alagoense (CSA) y suena con retirarse a los 41 años, los mismos con los que lo dejó Romario.

Por cuestiones de agenda el próximo viernes no se publicará post por lo que el blog permanecerá inactivo hasta el lunes. Aprovecho para deciros que ya ha salido una nueva edición del programa de fútbol internacional "90minutos". Podéis escucharlo haciendo click en la columna derecha del blog.

lunes, 6 de febrero de 2012

Un solar de lujo

No sabría decir que fue lo más triste de la tarde de ayer: Si el penalti fallado por Aubameyang, que dejaba a Gabón fuera de su Copa África y condenaba al oscuro rincón de las sombras al que hasta ese momento era el mejor jugador del torneo, o la imagen del Chelsea dejándose comer la tostada por el United.

De lo primero no hay mucho que hablar, un país más castigado por la fatídica distancia de los once metros que separan un punto pintado con cal de la portería contraria. De lo segundo se podría escribir un libro entero o incluso varios tomos en los que cabrían temáticas diversas que irían desde la espiritualidad hasta la psicología pasando por una oda a la vulgaridad.

Porque esa es la característica que para mi gusto mejor define a día de hoy a los londinenses. Nada, salvo algún detalle aislado de Mata o el rival que haya en frente, invita a ver uno de sus partidos. Es más, de no vivir en un tercer piso suscribiría al cien por cien esa mítica frase que dejó para la posteridad Bill Shankly acerca del Everton: "Si jugaran en el jardín de mi casa, cerraría las cortinas".

Al Chelsea hace tiempo que se le viene apagando la luz, que ha perdido su chispa si es que algún día la tuvo. Su modelo, con la entrada de Abramovich, revolucionó en parte el fútbol moderno. Un hombre que llegaba con el dinero por castigo y compraba lo que le venía en gana sin reparar en las cifras con las que llenaba los cheques.

Sin embargo es justo decir que a esa época de esplendor ayudaron diversos factores. Primero, el pico de forma que por entonces alcazaban Cech, Terry, Lampard y Drogba, o lo que es lo mismo, la columna vertebral de un equipo. Segundo, la mala situación de los demás. Salvo el United, omnipresente; el Liverpool intentaba encontrarse a sí mismo, un Arsenal con los bolsillos vacíos sobrevivía con lo puesto, el Tottenham usaba a los grandes como espejo en el que mirarse y el City... bueno, eran unos tipos de azul celeste que estaban ahí, en Manchester.

El Chelsea ofrecía buenas cosas, daba una buena imagen. Pero tampoco arrasaba. Se valía de la solvencia y la consistencia para sacar sus partidos adelante con los alardes justos y la efectividad inherente en un club que se permitía todos los caprichos posibles. Y a decir verdad nada ha cambiado demasiado.

Ante el dilema que supone renovarse o morir los capitalinos parecen haber optado por el harakiri como forma de vida. Dejarse llevar parece estar de moda en Stamford Bridge. Y me resulta arriesgado tratar de buscar culpables cuando en el fondo es la apatía y la falta de ambición el principal enemigo del vestuario.

Lampard ha ido disolviéndose en la mediocridad, Terry pasa más tiempo en las portadas por vergonzosas escenas extradeportivas que por lo que hace en el césped, Drogba hace la guerra por su lado y cada vez se encuentra más pasado de todo. Solo Mata, con ganas de comerse el mundo, es capaz de ofrecer algo diferente con el esférico en los pies. Junto a él Sturridge, que piensa en la Eurocopa, y un sorprendente Ramires, son los únicos están dando la talla con la camiseta azul.

Hasta Torres parece haberse contagiado de la tristeza que inunda a todo lo que tiene que ver con el Chelsea. Ya son 19 horas sin marcar. Solo ha visto puerta cinco veces desde que llegara el invierno pasado procedente del Liverpool. Tiene cara de sufrimiento sobre el pasto por la mezcla entre su mala racha y lo umbrío del páramo en el que se mueve.

Andre Vilas Boas, para mi gusto el entrenador con más futuro de Europa, anda perdido y sin rumbo renunciando a su estilo propio por intentar rememorar aspectos del que un día fue el dueño y señor del club, a la sazón su mentor. En un vestuario de gallitos su cacareo suena bajo y se pierde en el horizonte. La aventura le viene grande no por no estar capacitado sino porque la vieja guardia parece tener la mente en otro lado.

Todos sus ojos están puestos en Madrid, en ese hombre que un día sacó de ellos sus peores instintos. Quieren recuperar esa tensión, ese hambre, esa atmósfera cargada de puertas a dentro. Quieren volver a creer que pueden hacer algo grande. Y a día de hoy solo ven capaces de recuperar ese espíritu con el viejo capitán del barco. Será verano de marejada.

viernes, 3 de febrero de 2012

Top 35: Movimientos del mercado de invierno

Como viene siendo costumbre cada vez que se cierra un mercado de fichajes, no puedo evitar la tentación de realizar una lista con los traspasos más destacados y clasificarlos por orden de importancia. Es predecible, recurrente, pero al mismo tiempo tentador. Estos son las 35 mejores transferencias que se han realizado (algunos futbolistas llegarán el próximo verano) durante este último periodo.

35. Ryan Nelsen (Tottenham): Con 34 años, este veterano con mil batallas a sus espaldas llega de forma gratuita a un club de nivel después de haber defendido honrosamente la camiseta del Blackburn y de su selección. 197 partidos de Premier son aval suficiente para contrarrestar su edad.
34. Vaclav Pilar (Wolfsburgo): El futbolista checo, que intenta asemejarse a Lionel Messi viendo vídeos de Youtube, llegará en periodo estival a la Bundesliga, algo más que merecido por las cosas que ha demostrado en el Viktoria Plzen. Si consigue encajar en los cuadriculados planteamientos de Magath dará que hablar.

33. Ciro Immobile (Genoa): Preziosi ha decidido comprarle a la Juventus los derechos de este delantero que de momento está cuajando una maravillosa temporada en las filas del Pescara, con el que marcha líder de la Serie B. Llegará cuando acabe la temporada, con un poco de suerte con el objetivo del ascenso cumplido.

32. Robbie Keane (Aston Villa): En condiciones normales habría pasado "desapercibido" y no habría tenido cabida en esta clasificación pero su buen comienzo invita al optimismo. Su paso por Birmingham será fugaz pero, si sigue así, al menos podrá demostrar que la Premier no se le queda grande.

31. Ivan Santini (Friburgo): Ya hablé de este futbolista hace algunas semanas y no ha tardado demasiado en marcharse a un país de nivel. El Zadar ha actuado con él de forma inconsciente sin que quede muy claro el motivo. Con el equipo bordeando el descenso, sus goles eran el principal sustento. De hecho marchaba pichichi del campeonato croata antes de sellarse su cesión con opción de compra.

30. Jakub Swierczok (Kaiserslautern): Morador, al igual que Santini, del once de futuro de 2012 elaborado por "De paradinha", le llega su primera gran oportunidad con tan solo 19 años y unas magníficas cifras en la segunda polaca. Será complicado que llegue a la Eurocopa pero, osado él, ha decidido que si tiene que hacerlo sea por los méritos cosechados en un buen escaparate.

29. René Adler (Hamburgo): Las lesiones han lastrado la carrera de uno de los porteros con mayor proyección de Europa. Leno le ha ganado la partida bajo los palos del Leverkusen y ahora se ve obligado a emigrar hacia otro lugar para volver a contar con minutos y demostrar que aún tiene mucho que decir, a pesar de que en el país crece ahora una de las mejores generaciones que se recuerdan en su puesto.

28. Djibril Cissé (QPR): Vuelve a Inglaterra tras varios años fuera intentando reencontrarse a sí mismo y purgando sus pecados. No ha cumplido con las expectativas en la Lazio y por ello se marcha de Italia. A sus 30 años busca aún su última gran tarde. Quizás esa oportunidad pase por Londres.

27. Mevlut Erdinc (Rennes): Los 7,5 millones pagados por él son una pesada losa que está llamada a generarle mucha presión. En la capital gala se fue diluyendo después de unas buenas temporadas en el Sochaux, en las que hizo goles. Con él habrá que tener paciencia y no hablar de dinero. Por si acaso.

26. Vedad Ibisevic (Suttgart): El fútbol a veces puede ser cruel. Hace unos años se lo rifaba media Europa. Hoy se va con menos gloria de la que merecía a un equipo en reconstrucción. A los que amamos el fútbol nos gustaría presenciar de nuevo su mejor versión. Aún hay esperanza de que algo así suceda.

25. Maxwell Sscherrer (PSG): La atroz competencia en el Barcelona le cerró las puertas en la ciudad condal. Lo ha ganado todo pero con el sabor de boca agridulce que se le quede al que le gustaría ser más protagonista. Llega ahora a un proyecto interesante que tiene el dinero por castigo y donde será pieza clave.

24. David Trezeguet (River Plate): Un nombre histórico para un equipo histórico... en problemas. El objetivo, por supuesto, devolver a los bonaerenses a la élite de la que nunca debieron salir. Aportará experiencia, saber hacer y sobre todo goles, muchos goles. Pesan los años pero se mantiene el olfato.

23. Tiago Motta (PSG): Baja enteros por el excesivo precio que se ha pagado por él, un jugador al borde de los 30 años que a priori no se antoja una pieza fundamental en el esquema de Ancelotti por mucho que el técnico italiano consiga sacar lo mejor de él. Lo preocupante es la inflación que la operación pueda generar en un mercado ya de por sí renqueante.

22. Pavel Pogrebniak (Fulham): Se marchó al Stuttgart tras el éxito de su selección en la Eurocopa de 2009 y desde entonces le ha aportado muy poco al fútbol rindiendo muy por debajo del nivel esperado. Con el fichaje de Ibisevic su salida era inminente y ha optado por Londres, donde tendrá la difícil misión de hacer olvidar a Zamora.

21. Roman Pavlyuchenko (Lokomotiv): Algunas de las cosas que se han dicho del delantero que le precede en la lista se le podrían aplicar perfectamente a él. Con la llegada del verano, dos cosas volvían a entrar con fuerza: Los helados y los rumores sobre su marcha. Al final se ha marcado en invierno en busca de minutos y oportunidades que le garanticen disputar la Eurocopa, hasta ahora su torneo fetiche.

20. Wagner Love (Flamengo): Otro sospechoso habitual en materia de transferencias. Los rumores se habían intensificado en los últimos tiempos y ahora ya son una realidad, Deja Rusia, donde ha firmado actuaciones brillantes, para volver a su tierra natal y pelear por una aspiración alta como es la Libertadores.

19. Christian Noboa (Dinamo de Moscú): La influencia conyugal (su mujer es de la capital) es uno de los principales motivos por los que abandona Kazan con rumbo a Moscú. El mediocentro cobrará protagonismo dentro de un club que cada día resulta más interesante en su evolución.

18. Bobby Zamora (QPR): Es curioso lo de este punta, que puede haber firmado el peculiar record de fichar por cuatro equipos londinenses de forma consecutiva. A su paso por el Tottenham, el West Ham y el Fulham le sigue una nueva etapa en la que el objetivo es lograr la salvación. Con él sobre la hierba parece más factible.

17. Gary Cahill (Chelsea): Su nombre ha sonado para multitud de equipos pero al final se marcha al Chelsea, que ha demostrado ser el más hábil en el momento clave; cuando el central ha descubierto que el Bolton iba a hacerle más mal que bien. Será un buen complemento para Terry toda vez que a David Luiz aún le falta madurez.

16. Nikica Jelavic (Everton): Diez millones ha pagado por el David Moyes tras ver de lo que era capaz en el Glasgow Rangers. Los escoceses, de capa caída, se deshacen de su delantero referencia pero a cambio ingresan una cantidad de dinero interesante, quizás mayor de lo esperable.Será bonito ver progresar al croata en las islas.

15. Ahmed Musa (CSKA): Hay muchos que desconfían del rendimiento de los jugadores que destacan en la Eredivisie cuando se marchan fuera de Holanda. Numerosos fracasos dan fe de ello. Pero con Musa todo podría ser diferente. Su buen comienzo de temporada y el potencial que se le presupone le convierten en un tipo especial. Eso sí, habrá que observar su adaptación.

14. Pontus Wernbloom (CSKA): El otro gran futbolista que el equipo del ejército importa procedente del país tulipán. Mediocentro talentoso nacido en Suecia, su aportación era vital para un AZ que tornaba en conjunto revelación.

13. Ricardo Rodríguez (Wolfsburgo): Este debería ser el año de la explosión de uno de los laterales izquierdos con mayor proyección del mundo. Sonaba para la liga española aunque finalmente recalará en Alemania. Debería ser, a priori, el paso previo para dar el salto a un equipo grande.

12. Nolan Roux (Lille): Futbolista llamado a mejorar las prestaciones de los que tiene a su alrededor, y eso no es ninguna nimiedad cuando juegas junto a nombres como Hazard o Payet. Buenos movimientos, buen desmarque y gol. Unas virtudes que a buen seguro sumarán en una plantilla que poco a poco se va deshaciendo.

11. Santiago Silva (Boca Juniors): Su paso frustrado por Italia no debería restarle importancia a este traspaso, que ya ha demostrado, a base de goles, que en Argentina tiene mucho que decir. El "tanque" llega con hambre y la munición preparada para perforar las redes rivales.

10. Marc Janko (Oporto): Llega el austríaco para compensar la ligera decepción que de momento a supuesto Kléber, aún en proceso de adaptación. En principio ese paso no debería darlo el ex jugador del Twente, que ha demostrado que sabe besar las redes independientemente del país en el que juegue. No aportará lo que en su día dejó Falcao pero ejercerá al menos como un referente arriba.

9. Balázs Dzsudzsák (Dinamo): Llegó en verano al Anzhi como un fichaje de relumbró tras sus buenas actuaciones en el PSV pero sus problemas físicos y la falta de templanza de una entidad que exige resultados inmediatos para rentabilizar la inversión motivan su cambio de equipo. Sus virtudes siguen intactas, por ello es una adquisición de lo más interesante.

8. Thierry Henry (Arsenal): No va a aportar demasiado, llega pasado de todo con Estados Unidos en su mente, ha perdido facultades, ya no es la estrella de antaño... pero ver al francés de nuevo con la camiseta del Arsenal cuanto menos impone. Su aportación no será excesiva pero es un faro que puede alumbrar a sus compañeros, un ídolo que vuelve al lugar donde es venerado. Aunque solo sea por marketing y por emotividad, merece la pena.

7. Papiss Demba Cissé (Newcastle): Tras cargar sobre sus hombros con el Friburgo la pasada campaña y llevarle a una más que meritoria salvación, el equipo se le quedaba claramente pequeño. Llega ahora a las urracas para acompañar en las labores ofensivas a Demba Ba. Dos futbolistas del mismo país, que se conocen y se compenetran. Si consiguen trasladarlo a la Premier...

6. Admir Mehmedi (Dinamo Kiev): Poco, muy poco, se ha hablado de este traspaso. Y no tiene demasiado sentido. Se trata de uno de los nombres más prometedores del fútbol suizo y europeo. Ha cumplido de forma sobresaliente con las inferiores de su país y ya ha debutado con la absoluta. La única duda está en ver cómo tolera el frío ucraniano.

5. Eduardo Vargas (Nápoles): No ha empezado todo lo bien que se esperaba la etapa en Italia del que fue uno de los jugadores revelación de Sudamérica en 2011. Sin embargo tiene tiempo y calidad más que suficiente para revertir la situación y convertirse en ídolo de San Paolo. En la U de Chile ya saben de lo que es capaz y a buen seguro le echarán de menos.

4. Moussa Sow (Fenerbache): Aún me cuesta entender la decisión tomada por el delantero africano, uno de los mejores futbolistas de la Ligue 1. Se marcha a un club en franca decadencia que encima está en el ojo del huracán por sus presuntas irregularidades, a una liga que cada vez resulta menos competitiva. Ni siquiera el dinero justifica el paso atrás de alguien que podía haber tomado una decisión semejante más tarde. Él sabrá.

3. Kevin De Bruyne (Chelsea): Nadie duda que será una estrella, la enésima perla de la prolífica y poco aprovechada generación belga. Lo tiene todo para triunfar y a buen seguro lo conseguirá en Londres a partir del próximo verano. Mientras se mentaliza para ello aún le queda medio año en el Genk.

2. Freddy Guarín (Inter): Los milaneses logran en cesión, con opción de compra a precio razonable, hacerse con un futbolista tremendamente infravalorado. Ocupa mucho campo, tiene llegada, posee un buen físico... pega en Italia. Por ello también le quería la Juventus aunque finalmente Moratti arrimó el ascua a su sardina.

1. Marco Reus (Borussia Dortmund): Futbolista escandaloso, estratosférico, mágico... se acaban los adjetivos. Su impresionante temporada en el Moenchengladbach viene a confirmar lo que ya apuntaba. Se esperaba que saliera en verano pero en su país no lo han permitido. Se lo lleva el Dortmund por delante del Bayern. En años anteriores hubiera sido al revés. ¿Cambio de paradigma?

miércoles, 1 de febrero de 2012

El balón vuelve a llorar

Lo normal un miércoles sería que en este espacio apareciera un texto dedicado a un futbolista al que se le ha perdido la pista por el mundo. De hecho tenía preparada una buena historia pero si os soy sincero no tengo ningunas ganas de hacerla después de enterarme de lo acontecido en Egipto donde, de momento, 73 personas han muerto tras la disputa de un encuentro entre el Al Ahly y el Al Masry.

Una vez más la barbarie y la estulticia de los descerebrados que acuden a un estadio a descargar sus frustraciones con todo aquél que se cruce en su camino ha teñido el verde del césped de rojo sangre, el color de tragedia. Personas de todas las edades, supongo que también niños, han perdido la vida por ir a alentar a su equipo e intentar llevarle en volandas hacia la victoria.

En momento así uno siente impotencia. Pierde las ganas de ver fútbol. ¿Qué clase de sociedad tenemos que es capaz de autodestruirse por lo que hacen veintidós tíos vestidos de corto durante 90 minutos? ¿Acaso nos estamos volviendo locos y hemos perdido la perspectiva de lo que vale una vida humana?.

Algunos me diréis que estas cosas suceden, afortunadamente, en contadas ocasiones. Que además no acontecen en todos los sitios. Que más personas mueren en zona de guerra cualquier día esporádico. Es cierto pero eso no convierte en menores tragedias como esta, propiciadas por escoria que saca lo peor de sí misma arrastrando en su camino a los demás.

En la barra libre de terror que ha sido esta tarde la ciudad de Port Said se han juntado muchos factores. Aficionados calientes por un partido, el odio de algunos hacia las fuerzas del orden por lo acontecido en el país durante los últimos meses, falta de seguridad y de asistencias sanitarias... Ingredientes todos ellos de un cóctel macabro que, desgraciadamente, ya se han repetido con anterioridad en otros escenarios.

Cuando algo así pasa los máximos dirigentes del fútbol mundial y local se llevan las manos a la cabeza. Acuden a algunos homenajes. Lanzan mensajes de condolencia en muchas ocasiones poco creíbles. Y así salen del atolladero sin ofrecer soluciones, sin promover las necesarias inspecciones en los estadios, sin emprender medidas que ayuden a evitar más hechos luctuosos como este.

Todo es triste, muy triste, tristísimo. En un tiempo en el que se sobredimensiona cualquier tontería que puedan decir en rueda de prensa Mourinho y Guardiola, donde el tema de conversación es la actuación de un árbitro... quizás ha llegado el momento de cambiar el paradigma. Violencia llama a violencia. Vendamos otros valores, asumamos otro discurso, demos ejemplo. No olvidemos que el fútbol es un juego. Aunque solo sea en memoria de los fallecidos hoy. Descansen en paz.