miércoles, 30 de enero de 2013

¿Qué ha sido de... Entrenadores viajeros (V): Claude Le Roy?

 
No resulta excesivamente complicado seguirle a día de hoy la pista a Claude Le Roy. Basta con sintonizar Eurosport o leer un poco sobre las evoluciones de la República Democrática del Congo en la Copa África. Fue noticia antes del torneo, cuando se llegó a decir que había dimitido. Y lo ha sido hasta el pasado lunes día en el que un empate contra Mali apeaba a su equipo de la competición.

Un fracaso previsible en un grupo en el que también estaba Ghana y Níger, pero un duro golpe anímico para un técnico que había superado la primera fase en sus anteriores seis participaciones. De hecho se culpó por el tropiezo contra los segundos, que llegó después de permitir trasnochar a los jugadores para celebrar el galardón que recibió Diumerci Mbokani como mejor futbolista de la liga belga.

Así de exigente es el técnico francés, leyenda del fútbol africano y aventurero empedernido como indican los sellos de su pasaporte. Treinta y tres años de carrera jalonan un currículum que empezó a escribir en 1980, cuando se desempeñó como jugador-entrenador en el Amiens. Antes le había pegado patadas al balón en el Rouen, el Ajaccio, el Avignon y el Stade Lavallois.

Culo inquieto, no tardó demasiado en salir de su país. Tras dirigir al Grenoble, se embarcó en su primera experiencia internacional trabajando en el Al Shabab de Arabia Saudí cuando el fútbol en aquél país caminaba por entonces en pañales. Su labor le abrió las puertas de una selección importante en África como Camerún y no decepcionó lo más mínimo. No solo convirtió a los "Leones indomables" es subcampeones de la Copa África en 1986 y en campeones dos años después, sino que además sentó las bases del éxito del Mundial de 1990.

Por entonces él ya desarrollaba su actividad en Senegal, a la que llevó a los cuartos de final del torneo continental en 1992. Seducido por nuevos retos, cruzó el mundo rumbo a Malasia para ocuparse del banquillo de la selección asiática. Fue una época de tranquilidad que también trajo consigo trabajo de despacho como consejero del Milán y como Director Deportivo del Paris Sain Germain. Finalizada ésta, volvió a la acción para hacerse de nuevo con las riendas de Camerún de cara al Mundial de Francia 98, el que se celebraría en su país natal.

Terminada su vinculación con la Federación decidió regresar al balompié de clubes aceptando una oferta del Estrasburgo a la que siguió otra del Guizhou Renhe chino y una más del Cambridge United, ese club del que tanto se habla en el recomendable libro "Fiebre en las gradas" y donde hizo las veces de asesor de su discípulo aventajado Hervé Renard, el mismo que coronó a Zambia como campeona en la última edición de la CAN.

Después de aquello volvió a recibir la llamada de África. Esta vez llegaba de la misma República Democrática del Congo que conduce hoy en día. Fue una época a la que puso fin cuando fue el elegido para dirigir a la emergente Ghana, con quien llegó a alcanza el decimocuarto puesto en el ránking FIFA, récord nacional hasta la fecha.

Entonces llegaron los petrodólares procedentes de Omán, a cuyo seleccionado llevó al éxito en la Copa del Golfo de 2009. Le Roy les cambió la cara y un equipo con tendencia a la derrota fue capaz de imponerse en los penaltis a los siempre poderosos saudíes. No fue en cambio su última experiencia antes de recalar en su actual puesto. Antes de que todos los funestos hechos que ahora asolan al país estallaran, también fue seleccionador de Siria durante dos meses.

No hay comentarios: