El fracaso de la selección olímpica de fútbol ha abierto en España un nuevo dilema, el de la idoneidad de incluir este deporte en la cita. En mi opinión la discusión es absurda teniendo en cuenta que estamos hablando del más practicado en el mundo. Sí se podría entrar a discutir el hecho de que solo vayan sub-23, pero entonces algunos futbolistas anónimos no tendrían la oportunidad de sus vidas. Esta es la historia de los cameruneses que ganaron el oro en Sidney.
Idriss Kameni: Poco se puede decir del guardameta en aquella cita. La gesta le valió para dar el salto a Francia y posteriormente a España en el 2004. Desde entonces, no ha salido de nuestro país. Primero tuvo un dilatado pasado en el Espanyol y ahora un interesante presente en el Málaga. Uno de los mejores de la Liga en su puesto.
Pierre Wome: Otro futbolista que también jugó en el Espanyol...y en infinidad de clubes más. Dio el salto a Europa de la mano del Vicenza. Posteriormente militó en el Lucchese, en la Roma y en el Bolonia, donde conoció el éxito olímpico. Dos años después se marchó al Fulham y a partir de ahí se convirtió en viajero. Junto al conjunto catalán; el Brescia, el Inter, el Werder Bremen, el Colonia y desde febrero el Coton Club de su ciudad completan un extenso curriculum. Transformó el penalti definitivo.
Serge Mimpo: Su éxito fue demasiado efímero. Cuando la convocatoria para Sidney llamó a su puerta, andaba perdido por tierras griegas. Militó en el Panachaiki y en el Ethnikos Asteras. Luego cambió de aires y se marchó a Francia. Encontró acomodo en la capital pero no en el Sain Germain sino en el Paris FC. Después de mucho tiempo allí, firmó por el Red Star Saint Ouen. Ya ha colgado las botas.
Patrice Abanda: La presea le sirvió para dar un salto de calidad del Apollon Kalamaria griego al Sparta de Praga. Fue un espejismo. Apenas jugó con los capitalinos y su carrera se diluyó en entidades de menos renombre de el país como el Drnovice y el Teplice. Acabó retirándose en el Besa Kavaje albanés.
Nicolas Alnoudji: En su caso lo más sencillo es decir los nombres de sus equipos desde que se proclamó campeón: Cakir Rizespor (Turquía), Sedan (Francia), Bastia (Francia), Al-Ahly y Al-Sailiya (Qatar), Cotonsport Garoua (Camerún), RAEC Mons (Bélgica), Olhanense (Portugal), Créteil-Lusitanos (Francia), Pandurii Tarju Jiu (Rumanía), JS Saint-Pierroise (Isla de Reunión) y Cotonsport Garoua (Camerún). Conviene añadir que en todo su carrera ha movido la friolera de cero euros en traspasos.
Geremi Nitjap: Viejo conocido de los aficionados del Real Madrid, tras su paso por España firmó una hoja de servicios ligada casi de forma íntegra a la Premier League. El último equipo que se le recuerda a alto nivel fue el Newcastle. Después llegaron el Ankaragucu, el Larissa y finalmente la inevitable retirada en el año 2011.
Samuel Etoo: Su historia es de sobra conocida. Uno de los futbolistas de más renombre en el fútbol europeo los últimos años deslumbró con el Barcelona. Posteriormente se marchó al Inter de Milán y a día de hoy llena sus bolsillos en el Anzhi Majachkalá. Lejos, muy muy lejos, quedan esos tiempos en los que vestía la camiseta del Leganés soñando con llegar al primer equipo del Real Madrid.
Patrick Mboma: Su historia ya la relaté en esta bitácora. Aquí os la refresco: http://deparadinha.blogspot.com.es/2011/12/que-ha-sido-de-patrick-mboma.html
Lauren Etame: Criado en Sevilla y con pasado en el Utrera, el filial del club hispalense, el Levante y el Mallorca fueron los equipos que defendió antes de fichar por el Arsenal tras aquél torneo. Miembro de los "invencibles" de Wenger; tras ocho temporadas allí se marchó al Portsmouth y posteriormente al Córdoba, donde colgó las botas.
Aaron Nguimbat: Poco provechoso fue para él triunfar. Militaba en el Canon de Yaoundé y de ahí ponía rumbo al Skonto Riga. Tras volver a su país para defender los colores del Unisport, dejó el fútbol en la liga de Indonesia.
Serge Branco: Pese a compartir apellido con el gran futbolista brasileño, no corrió la misma suerte. Consiguió aguantar tras campañas en el Eintracht viviendo de su éxito olímpico. Después de aquello ha pasado por nueve equipos en nueve años: Stuttgart, Leeds, QPR, Shinnik Yaroslavl, Krylya Sovetov Samara (dejó el club por insultos racistas de los aficionados rivales), Duisburgo, Levadiakos, Wisla Cracovia y finalmente el Muharraq Club (Bahrein).
Daniel Bekono: Curiosa la historia del que fuera guardameta suplente en aquella final. Aguantó en su Camerún natal varios años antes de aceptar una oferta del Beroe Stara Zagora búlgaro. Allí se convirtió en el primer capitán negro en la historia de la liga. Luego se marchó al CSKA de Sofía y, cuando decidieron prescindir de sus servicios, lo dejó. Ahora es leñador en Viena.
Albert Meyong Zé: Jugador de mucho cartel en Portugal, su paso por España (Levante y Albacete) fue más bien pobre. Estuvo tres años en el Braga después de aquello y a día de hoy milita en el Vitoria de Setúbal, el equipo donde se dio a conocer.
Clement Beaud: Otro clásico del fútbol luso, este más anónimo por carecer de regularidad. Sus primeros pasos en Europa los dio en el Widzew Lodz polaco y en el Vetra Vilnius lituano. A partir de ahí emigró al país ibérico para labrarse una dilatada carrera en el Académica de Coimbra, el Moreirense, el Esmoriz, el Académico Viseu, el Penaldo Do Castelo, el Operário y finalmente el Cifaes; un equipo de tercera que repesenta a una población de 3.000 habitantes.
Daniel Kome: Poco más se puede descubrir de este futbolista que es casi más español que la paella. Atlético B, Levante, Numancia, Getafe, Ciudad de Murcia, Mallorca, Valladolid y finalmente el Tenerife le tuvieron en sus filas.
Patrick Suffo: El delantero llegó a coincidir con Kome en el Numancia cuando el club estaba aún en Segunda y contaba con otros futbolistas de gran recuerdo como el rumano Rosu, que posteriormente llegaría a marcarle un hat-trick al Real Madrid. A Suffo debió gustarle nuestro país porque mucho tiempo más tarde aceptó una oferta del Puertollano. Además vistió las camisetas del Nantes, del Sheffield United, del Sunderland, del Al Hilal, del Coventry, del Dubai Club, del Odd Grenland, del Maccabi Petah Tikva, y del Ashdod. Acbó dejándolo en el Wrexham al concluir la 2008-2009. Por cierto, si queréis seguirle en Twitter tiene cuenta: patsuffo
Joel Epalle: Grecia se convirtió en su habitat, el lugar donde encontró acomodo tras llegar a Europa. Pasó por cinco equipos diferentes (Ethnikos, Panachaiki, Iraklis (2), Aris y Panathinaikos) en seis etapas. Además probó suerte en el Bochum y en el Bakú. Actualmente sigue dándole al balón en el Sarawak malayo.
Modeste Mbami: Hace no demasiado que jugó en el Almería realizando buenas actuaciones por lo que su recuerdo es reciente. Antes de llegar al club andaluz había hecho tablas en Francia defendiendo los intereses del Sedan, el PSG y el Marsella. Después de vestir la camiseta rojiblanca las prioridades cambiaron. El Daelian Aerbin y el Chanchun Yatai chinos fueron los clubes que precedieron a su actual estancia en el Al-Ittiad Dschidda saudí.
Con la llegada del mes de agosto habrá un ligero cambio en el blog. La periodicidad hasta septiembre será variable a fin de darme un pequeño descanso. Habrá semanas en que siga la tónica habitual de lunes-miércoles-viernes y otras en las que se publiquen menos posts. Disculpad las molestias. Un saludo.
jueves, 2 de agosto de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario