miércoles, 4 de agosto de 2010

¿Qué ha sido de... Edgaras Jankauskas?


La Real Sociedad ha vuelto a Primera y lo ha hecho por la puerta grande, fichando a dos delanteros de relumbrón. Sin embargo no conviene pasar por alto aquellos tiempos en los que esto no sucedía y las posiciones ofensivas las ocupana tipos como Edgaras Jankauskas, que sin tener un mal rendimiento pasó sin pena ni gloria por nuestro país.

Y es que el lituano entra en esa selecta lista de trotamundos del fútbol, siendo uno de esos jugadores que debe agradecerle al balompié el hecho de que le haya permitido conocer mundo pese a pertenecer a uno de esos países de los que pocos futbolistas salen. Precisamente en su tierra fue donde comenzó su carrera formando parte durante cinco años de la plantilla de Zalgiris Vilnius. Allí debutó con 16 años al tiempo que lo hacía con su selección, con la que llegó a las 56 internacionalidades.

Sus primeros pasos lejos de la frontera fueron cortitos y apenas llegaron hasta Rusia, donde jugó en Moscú primero para el CSKA y posteriormente para el Torpedo antes de firmar por el Brujas, donde se convirtió en activo importante en la conquista del título de liga en la temporada de su estreno.

En enero del año 2000 entró en la historia de su nación al pagar la Real Sociedad por él 2.3 millones de euros, la cifra más alta abonada hasta la fecha por un futbolista lituano. Durante sus dos temporadas en el conjunto Txuri Urdin, sólo una y media la pasó en San Sebastián ya que el tiempo restante se marchó cedido al Benfica, donde sus actuaciones (8 goles en 12 partidos) le valieron para firmar por el Oporto de Mourinho.

Allí vivió sus mejores años, convirtiéndose en un recurso de garantías para aquella plantilla que lo conquistó todo hasta que se marchó cedido al Niza, por dónde pasó sin pena ni gloria. Tras dejar el Oporto se marchó al Hearts escocés a través del Zalgiris Kaunas, ambos equipos propiedad de Valdimir Romanov. En su primera temporada dejó buenas cosas pero las lesiones le atacaron en la segunda.

Tras temrinar su vículo contractual se marchó a Chipre para jugar con el AEK Larnaca. Posteriormente se le volvió a presentar una buena oportunidad de la mano del Belenenses pero apenas duró unos partidos antes de decir que prefería jugar cerca de su país y de poner rumbo al Skonto Riga, donde empezó a vislumbrar el final de su carrera.

Sin embargo el destino aún le abrió una última puerta que decidió atravesar. Esa fue la del New England Revolution estadounidense, dónde se ha convertido en uno de esos futbolistas europeos que están potenciando la competición.

1 comentario:

SoyunFDF dijo...

Desconocía por completo donde estaba Jankauskas, muy buen artículo. Enhorabuena