lunes, 23 de agosto de 2010

El nuevo juguete de Preziosi

Se acerca la Navidad y con ella los estridentes anuncios de juguetes que cada año pueblan la pequeña pantalla. Desde la Barbie en sus infinitas versiones hasta los Playmobiles en todos los escenarios posibles, todo vale para engatusar a los niños que esperan con ansias la llegada de sus majestades los Reyes Magos.

Entre todas esas campañas suele haber unas que tienden a pasar desapercibidas, las de la compañía italiana Giocchi Preziosi. Sus anuncios no son lo más elaborados y viéndolas se podría decir que sus productos no son los más llamativos. Además la melodía corporativa, si muchos la conocéis, no tiene demasiado gancho.

Y a pesar de todo eso, aunque pueda resultar sorprendente, es la segunda compañía juguetera más importante de Europa (sólo por detrás de Lego) y la quinta del mundo gracias a sus manufacturas y a la adquisición de los derechos de distribución en Italia de compañías como Bandai, aquella de "Bandai, que guay" que patrocinó al Atlético y que creó juguetes como el archifamosísimo Tamagochi.

Muchos pensaréis en el porqué de este rollo que os estoy soltando y en la relación que tiene con el fútbol. Pues bien, cada euro que se invierte en esta fábrica de felicidad infantil va a parar a manos de Enrico Preziosi, dueño de la empresa y a la sazón propietario del equipo que ha revolucionado este verano el mercado de fichajes en Europa.

En un país de propietarios extravagantes como Berlusconi o Moratti, Preziosi está comenzando a crear una escuadra potente asentada en los sólidos cimientos de la juguetería (un sector que no nota la crisis), convirtiendo al actual Génova en un aspirante al título con una plantilla de nivel medio alto completamente remozada este verano. El ambicioso empresario ha sido capaz de aprovecharse del periodo estival austero para llevarse a precio de ganga a jugadores que cualquier otro año le habrían costado a los grandes cuantiosas cifras económicas.

Quizás por la envidia que supone ver al máximo rival, la Sampdoria, disputando la previa de la Champions o porque ha llegado el momento de dar el paso decisivo hacia adelante tras varias campañas convertido en un conjunto vendedor, el caso es que la plantilla de este año está en condiciones de pelear por grandes metas tanto en Italia como en Europa.

Pensando en un futuro prometedor han llegado varias cesiones interesantes de futbolistas nacionales como Mattia Destro y Andrea Ranocchia, ambos procedentes del Inter, el primero en cesión con opción de compra y el segundo en sistema de co-propiedad. El mismo proceso que con Destro se ha seguido con Franco Zuchulini, el argentino prestado por el Hoffenheim que en caso de realizar una buena temporada podría permanecer en la entidad por poco más de cinco millones de euros.

También interesante se antoja la adquisición del central Chico, que realizó una campaña brillante con el Almería y que promete ser uno de los futbolistas españoles con más proyección de futuro en su posición. No podrá sin embargo el andaluz compartir equipo con su compatriota Alberto Zapater, chivo expiatorio para la contratación de una figura de primer nivel.

El ex jugador del Zaragoza, que ha maravillado con sus actuaciones en Italia, se vio obligado a poner rumbo a Portugal en la operación que llevó al ansiado Veloso al conjunto genovés. El mediocentro luso contará además a su lado con Eduardo, el futbolista más destacado de su selección en Sudáfrica, especialmente en el partido contra España dónde lo paró casi todo.

Sin embargo no acaban ahí las compras. El entrenador Gian Piero Gasperini, al frente de la nave desde 2006, tendrá a su disposición a otros tres futbolistas de renombre. Quizás el menos destacado sea Gegerly Rudolf, el infravaloradisimo héroe húngaro del milagroso Debrecen del año pasado. Mucho más conocidos son Rafinha, ese lateral derecho de calidad insuperable que cada año ha sonado para los grandes, y el efectivo y portentoso Luca Toni, que compartirá el ataque con otros que ya estaban como Sculli o Palacio.

Si la maquinaria funciona bien y las piezas encajan, el nuevo invento de Preziosi promete ser un éxito capaz de competir con los "Transformers" del Manchester City en Europa o con el diábolo que es el Milán en Italia, un juguete antiguo que va cayendo en desuso pero que aún se mantiene en pie a pesar de la dejadez de sus dueños.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Rafinha lateral derecho.

Futbólogos dijo...

Como molas Carlos

Nico García dijo...

Je, je, como ha molado. esto también lo sabía yo. La verdad es que el Génova se ha hecho un equipo bastante apañado, para estar ahí arriba nuevamente. A ver que tal lo hace Chico, un central, que yo creo que irá a la selección...
Saludos desde La Escuadra de Mago