viernes, 3 de enero de 2014

La agonía del Pompey

Desde hace años los palcos de Inglaterra se han convertido en una pasarela por la que han desfilado varias de las fortunas más boyantes del planeta. Hombres con el dinero por castigo y pocos escrúpulos a la hora de gastárselo en sus nuevos juguetes. Tal es así que algunos como el malayo Vincent Tan, propietario del Cardiff, han cambiado incluso los colores del uniforme de su equipo.
 
Los ha habido bueno, malos, peores... y luego todos los que le cayeron en desgracia al Portsmouth, que actualmente navega por la League Two plantando cara con la poca dignidad que le queda a una situación económica preocupante. Desde que se hiciera con la entidad el ruso con pasaporte israelí Alexandre Gaydamak, todo ha ido cuesta abajo.
 
Tras su marcha entró en escena Sulaiman Al-Fahim, al que el equipo apenas le duró días en las manos antes de traspasárselo a Ali al-Faraj, que lo adquirió gracias aun préstamo del hongkonés Balram Chainrai, que lo acabaría heredando cuando este falló en los pagos. El final del vodevil acabó cuando otro ruso, Vladimir Antonov, terminó de sepultar el cadáver al ser acusado el club por Hacienda de no pagar 1,6 millones de libras en impuestos.
 
El dinero se fue esfumando por el camino hasta crearse un agujero difícil de tapar y también los puntos, que se perdían fuera del campo en sanciones federativas. Hundidos y a la deriva bajo el timón de los administradores concursales naufragaron hasta la cuarta división. Solo quedaba el tiro de gracia para acabar con más de cien años de historia.
 
Sin embargo, en las situaciones más adversas es cuando de verdad se aprecia quién siente de verdad los colores. Un grupo de seguidores, el "Pompey Supportes trust" consiguió juntar la cantidad suficiente para hacerse cargo de las decisiones del club. Compraban un "producto" ruinoso pero su "producto", ese al que habían sido adictos desde la infancia.
 
La decisión ha permitido preservar el orgullo del escudo pero no el deportivo. Tras caer derrotados ante el Southend el día de Año Nuevo, los de Fratton Park solo suman seis puntos de los últimos treinta y tres ocupando la decimonovena posición a cuatro puntos del descenso a Conference National.
 
Es la triste realidad de un club que hace poco más de tres años y medio pisaba el santuario de Wembley para disputar la final de la FA Cup. La demostración de que a veces las promesas del nuevo rico se construyen con cimientos del grosor del papel de fumar. Un aviso a navegantes, aquellas inversiones en futuro fallidas salvadas con los ideales del pasado.

Aprovecho para dejaros un artículo que he escrito para Spherasports sobre algunos de los defensas más peculiares que han participado en los últimos cinco mundiales. Si lo buscáis, semanas atrás hice uno sobre los porteros. En breve podréis leer otros sobre centrocampistas, delanteros y seleccionadores. Os mantendré informados. http://www.spherasports.com/noticia/anecdotario_de_la_copa_del_mundo_ii_los_defensas#.UsccGP-A3IU

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