viernes, 27 de agosto de 2010

El debate de Arteta como internacional inglés

Carlos Cruz

De todas las noticias que he leído este verano, una que me ha hecho muy feliz es la de que Arteta está dispuesto a vestir la camiseta de Inglaterra. Es algo que se veía venir, aunque hasta que no lo lees y se habla de ello, no eres consciente de la grandeza que puede suponer para el centrocampista del Everton vestir la elástica de los ‘Three Lions’. Siendo ya elegible por Fabio Capello, ya que sus cinco años en las islas le han permitido adquirir la nacionalidad inglesa, Arteta ha mandado un mensaje a todos aquellos que se quieran dar por aludidos (va por ti Capello), ya que en La Roja sabe que es imposible hacerse un hueco entre una de las mejores generaciones de centrocampistas de la historia.

Mikel Arteta llegó en 2005 a Liverpool, pero no para jugar en el equipo que por aquellas dirigía Benítez y que llevó a campeón de la Champions League, sino para jugar apostar por el Everton, el otro equipo de la ciudad del río Mersey. Procedente de la Real Sociedad, conjunto que le vendió por 2 millones de libras, una cantidad muy baja si miramos el rendimiento que ha dado con los Toffees, Arteta se fue haciendo poco a poco un hueco en el once titular hasta acabar vistiendo el brazalete de capitán. Eso no podía pasar inadvertido para el ya ex seleccionador nacional Luis Aragonés, quien le iba a convocar para un encuentro de La Roja en Old Trafford pero una lesión le dejó sin debutar. Vicente del Bosque tampoco ha pensado en él, ya que todavía se estaba recuperando de una grave lesión que le tuvo casi una temporada separado de los terreno de juego y, como he dicho, con la competitividad que hay en el centro del campo de España, en donde hasta Fábregas es suplente, Arteta ve más fácil disfrutar de oportunidades con Inglaterra.

El centrocampista donostiarra ha dejado claro que consideraría, y mucho, la posibilidad de jugar para otra nación si recibe la llamada, pero en Inglaterra hay un debate abierto con diferentes opiniones. La que más me han impactado es al de Roy Keane, entrenador del Ipswich Town y leyenda del United, y que a pesar de no ser inglés (es irlandés) ha opinado y no está muy a favor de que Arteta vista la camiseta de los ‘Three Lions’. Según Keane, Arteta nunca cantará el himno de Inglaterra ya que es español, y personalmente creo que nunca ‘salvará a la Reina’, pero se merece una oportunidad en un combinado que verdaderamente necesita un jugador de sus características. Como esta he encontrado muchas opiniones, pero también me he encontrado con un grupo en Facebook que se titula ‘Mikel Arteta for England 2010’ y que por el momento tiene 1450 miembros, por lo que hay gente que apoya la moción y dejando a un lado su patriotismo, prefiere ver reforzada su selección nacional con un jugador de doble nacionalidad.
A mí, como a uno de mis jugadores preferidos, Steven Gerrard, me encantaría ver a Arteta defendiendo los colores de Inglaterra, ya que es un grandísimo profesional que se merece disputar las competiciones internacionales y que además, y más importante, seguro que ayudaría al combinado de Fabio Capello en esta etapa tan oscura.

lunes, 23 de agosto de 2010

El nuevo juguete de Preziosi

Se acerca la Navidad y con ella los estridentes anuncios de juguetes que cada año pueblan la pequeña pantalla. Desde la Barbie en sus infinitas versiones hasta los Playmobiles en todos los escenarios posibles, todo vale para engatusar a los niños que esperan con ansias la llegada de sus majestades los Reyes Magos.

Entre todas esas campañas suele haber unas que tienden a pasar desapercibidas, las de la compañía italiana Giocchi Preziosi. Sus anuncios no son lo más elaborados y viéndolas se podría decir que sus productos no son los más llamativos. Además la melodía corporativa, si muchos la conocéis, no tiene demasiado gancho.

Y a pesar de todo eso, aunque pueda resultar sorprendente, es la segunda compañía juguetera más importante de Europa (sólo por detrás de Lego) y la quinta del mundo gracias a sus manufacturas y a la adquisición de los derechos de distribución en Italia de compañías como Bandai, aquella de "Bandai, que guay" que patrocinó al Atlético y que creó juguetes como el archifamosísimo Tamagochi.

Muchos pensaréis en el porqué de este rollo que os estoy soltando y en la relación que tiene con el fútbol. Pues bien, cada euro que se invierte en esta fábrica de felicidad infantil va a parar a manos de Enrico Preziosi, dueño de la empresa y a la sazón propietario del equipo que ha revolucionado este verano el mercado de fichajes en Europa.

En un país de propietarios extravagantes como Berlusconi o Moratti, Preziosi está comenzando a crear una escuadra potente asentada en los sólidos cimientos de la juguetería (un sector que no nota la crisis), convirtiendo al actual Génova en un aspirante al título con una plantilla de nivel medio alto completamente remozada este verano. El ambicioso empresario ha sido capaz de aprovecharse del periodo estival austero para llevarse a precio de ganga a jugadores que cualquier otro año le habrían costado a los grandes cuantiosas cifras económicas.

Quizás por la envidia que supone ver al máximo rival, la Sampdoria, disputando la previa de la Champions o porque ha llegado el momento de dar el paso decisivo hacia adelante tras varias campañas convertido en un conjunto vendedor, el caso es que la plantilla de este año está en condiciones de pelear por grandes metas tanto en Italia como en Europa.

Pensando en un futuro prometedor han llegado varias cesiones interesantes de futbolistas nacionales como Mattia Destro y Andrea Ranocchia, ambos procedentes del Inter, el primero en cesión con opción de compra y el segundo en sistema de co-propiedad. El mismo proceso que con Destro se ha seguido con Franco Zuchulini, el argentino prestado por el Hoffenheim que en caso de realizar una buena temporada podría permanecer en la entidad por poco más de cinco millones de euros.

También interesante se antoja la adquisición del central Chico, que realizó una campaña brillante con el Almería y que promete ser uno de los futbolistas españoles con más proyección de futuro en su posición. No podrá sin embargo el andaluz compartir equipo con su compatriota Alberto Zapater, chivo expiatorio para la contratación de una figura de primer nivel.

El ex jugador del Zaragoza, que ha maravillado con sus actuaciones en Italia, se vio obligado a poner rumbo a Portugal en la operación que llevó al ansiado Veloso al conjunto genovés. El mediocentro luso contará además a su lado con Eduardo, el futbolista más destacado de su selección en Sudáfrica, especialmente en el partido contra España dónde lo paró casi todo.

Sin embargo no acaban ahí las compras. El entrenador Gian Piero Gasperini, al frente de la nave desde 2006, tendrá a su disposición a otros tres futbolistas de renombre. Quizás el menos destacado sea Gegerly Rudolf, el infravaloradisimo héroe húngaro del milagroso Debrecen del año pasado. Mucho más conocidos son Rafinha, ese lateral derecho de calidad insuperable que cada año ha sonado para los grandes, y el efectivo y portentoso Luca Toni, que compartirá el ataque con otros que ya estaban como Sculli o Palacio.

Si la maquinaria funciona bien y las piezas encajan, el nuevo invento de Preziosi promete ser un éxito capaz de competir con los "Transformers" del Manchester City en Europa o con el diábolo que es el Milán en Italia, un juguete antiguo que va cayendo en desuso pero que aún se mantiene en pie a pesar de la dejadez de sus dueños.

viernes, 13 de agosto de 2010

El Manchester da por hecho el fichaje de Ozil


Hoy me ha dado por revisar una serie de blogs del Manchester United para ver cómo están los ánimos de cara al comienzo de la temporada en Inglaterra y me he encontrado con una noticia bastante curiosa que seguro habrá levantado de la silla a más de un aficionado Red Devil.

La Web Oficial del Manchester United ya tiene el perfil de Mesut Ozil preparado, como si el fichaje estuviese cerrado (a mi me ha hecho bastante gracia y solo puedo pensar en Ferguson a los mando del ordenador editando el perfil del alemán para meter presión a esos clubes españoles que siempre ha tenido como enemigos).

Ozil es posiblemente el objetivo por el que más apuestan los grandes de Europa, estando Real Madrid, Manchester United, Barcelona y Chelsea entre otros detrás de ese centrocampista de ojos saltones que enamoro a todos los amantes del fútbol en el Mundial de Sudáfrica.

Los Red Devils han conseguido el negocio del verano fichando por unos 8 millones de libras a Javier Hernández (Chicharito), quien sin duda es un delantero de gran potencial y el cual también sorprendió a todos con su fútbol en Sudáfrica. Ahora podrían tener atado a Mesut Ozil, lo que convertiría al United en uno de los equipos mejor reforzados hasta la fecha, ya que personalmente coloco al Chicharito Hernández por delante de Berbatov -siempre que el búlgaro siga en Old Trafford- y a Mesut Ozil ayudando a todo un Manchester United y aparcando (vaya lástima, estos jugadores deberían ser eternos) a nombres de la talla de Paul Scholes o Ryan Giggs.

Aunque a muchos les haya podido sorprender que el perfil de Mesut Ozil aparezca en la página oficial del club, y más cuando hace poco estuvo Ferguson siguiéndole en el estadio del Fulham, donde el conjunto londinense jugó un amistoso contra el Werder Bremen, se dice en Inglaterra que el Manchester United siempre abre un perfil a los jugadores que está siguiendo muy de cerca o a punto de fichar, como ya ocurrió con Sami Khedira (perfil Khedira) jugador que ha fichado hace poco por el Real Madrid o Mario Balotelli (perfil Balotelli), quien finalmente fichará por el Manchester City.

No queda otra que esperar a ver si finalmente se hace efectivo el traspaso de Mesut Ozil al Manchester United, algo de lo que está hablando bastante poco la prensa y me sorprende después de ver lo que pone en la Web Oficial del equipo que entrena Sir Alex Ferguson.

Carlos Cruz (Leeds, UK)

miércoles, 11 de agosto de 2010

¿Qué ha sido de... Emmanuel Amunike?

Hace pocos años volvía a saltar a la palestra el bueno de Emmanuel Amunike (o Amuneke) gracias a una campaña de publicidad en la que se parodiaba uno de sus saques de banda. No fue sino la última de las bromas futbolísticas que durante muchos años se vertieron sobre la figura de uno de los fichajes más desastrosos del Barcelona, en parte por la plaga de lesiones que le castigaron sin piedad durante años.

Porque antes de eso Amunike era un futbolista prometedor que despuntó con las Superáguilas en el Mundial de Estados Unidos mientras militaba en las filas del Zamalek egipcio, equipo al que llegó a los 21 años procedente del Julius Berger de su Nigeria natal. Como suecedió con tantos otros su buena actuación en un buen escaparate le sirvió para el salto a Europa.

Durante tres años militó en las filas del Sporting de Lisboa hasta que el Barcelona pagó por él 3 millones de euros. El mismo tiempo que en Lisboa pasó en la Ciudad Condal donde apenas disputó quince partidos y dónde sólo recuerdan su decisivo gol ante el Logroñés fuera de casa que ayudó a que los azulgrana conquistaran la Liga.

Acabó yéndose del equipo de malos modos y casi defenestrado rumbo a Albacete donde una vez más las lesiones le lastraron jugando menos de 20 partidos en un nuevo periodo de tres años. Una vez finalizado su paso por La Mancha puso rumbo a Jordania donde jugó una temporada para el Al Wihdat antes de poner fin a su carrera con sólo 34 años.

Finalizada su carrera se marchó a vivir a Cantabria y llegó a entrenar a un equipo local antes de hacerse asistente de los saudíes del Al Hazm. Dejó este último puesto para convertirse en ojeador del Manchester United llegando incluso a compaginar esta labor con la de entrenador del Julius Berger nigeriano. Finalmente dejó el primer puesto para centrarse en el segundo y acabó cesado. Desde noviembre de 2009 es entrenador del Ocean Boys, equipo que también juega en su país natal.

Desde mañana cogeré tres semanas de vacaciones en las que escribiré en el blog cuando vaya sacando un rato, sin poder anunciaros una periodicidad fija.

lunes, 9 de agosto de 2010

El gol es un espectáculo en Garðabær

Garðabær es una ciudad de poco menos de 10.300 habitantes, situada en el área metropolitana de Reykjavík, que cuenta con una modesta página web en la que unos churumbeles rubios y sonrientes dan la bienvenida al visitante. Su contenido puede ser consultado en cinco idiomas diferentes y en él se resaltan elementos como la educación y la cultura, todo muy del norte de Europa.

Consultándo el portal uno se da cuenta de que poco tiene que ver. De hecho la sexta ciudad del país apenas cuenta con tres pequeños museos, un estudio de televisión, unos bonitos parajes naturales y, por encima de todo, el único Ikea que se sitúa en territorio islandés, exponente máximo del capitalismo en la zona.

Así pues todo hace pensar que nada tiene de relación con el fútbol este pintoresco lugar, que forma parte de una nación que apenas a escrito una letra en el inmenso libro de la historia del fútbol. Nada más alejado de la realidad. En un verano anodino de pocos fichajes, amistosos de escaso calado y la dulce resaca que nos adormila tras la conquista del Mundial, el equipo local de Garðabær está poniendo la nota de color.

Este no es otro que el Stjarnan, un club que canaliza todo tipo de deportes desde las categorías inferiores y también, como no puede ser de otra forma, el fútbol. Sus resultados en la Urvalsdeild les mantienen en la tibieza de la zona media a falta de siete jornadas a pesar de que aún conservan ciertas esperanzas de disputar la Liga Europa, pero sus celebraciones les han situado en los periódicos de medio mundo.

Originalidad al poder, los modestos futbolistas de este club han innovado hasta límites insospechados el arte que supone expresar la felicidad tras un gol e incluso han creado escuela, exportando alguno de sus shows a países como Japón.

No se sabe quién está detrás de todo esto pero sí quién suele ser el principal protagonista. Halldór Orri Björnsson está habituado a manejar los hilos bien lanzando la caña de pescar en la celebración del salmón o ejerciendo como "Rambo" mientras cruza el campo. Este futbolista de rubio platino y con el dorsal 10 a la espalda se ha convertido en una de las revelaciones de la competición y no sólo por su participación en los espectáculos corales de la plantilla. A sus 23 años está entre los máximos goleadores de la competición con siete dianas.

Portagonista es también Johann Laxdal, el salmón o el bailarín que no encuentra pareja, un lateral derecho de veinte años que ya ha pasado por todos las categorías inferiores de la selección y al que se le augura un futuro interesante. Ellos son sólo dos de los actores de estas performances tan insólitas, que están demostrando que en el fútbol hay cabida para el sentido del humor.

Personalmente echaba de menos cosas como esta ya que siempre me han encantado las celebraciones curiosas y diferentes. Bien es cierto que muchos les critican porque los rivales pueden sentirse incómodos o porque se puede perder tiempo con ellas y que incluso la FIFA llegó a criticar en su día acciones así, pero soy de los que opina que el gol es una fiesta y que, como tal, merece ser celebrado a bombo y platillo. Ojalá esta inciativa anime a muchos más equipos a seguir con el ejemplo. Stjarnan, no cambies nunca.

http://www.youtube.com/watch?v=IZHyUaJy_RI
http://www.youtube.com/watch?v=_0BRj1pBOQM
http://www.youtube.com/watch?v=Vfdeuaxkibw
http://www.youtube.com/watch?v=7UJNtfuPbbI
http://www.youtube.com/watch?v=fxkIjSiwBq4

viernes, 6 de agosto de 2010

Nombres del fútbol: Rafael Moreno Aranzadi

Quizás cuando hayáis leído el nombre del post no sepáis a quién me refiero y ni os suene. Dejaré la intriga para las últimas líneas aunque no dudo que alguno que sea un poco perspicaz o sepa algo de historia de nuestro fútbol ya descubrirá el motivo por el que mi protagonista de hoy es conocido por todos.

Nacido en el año 1892 este sobrino del escritor Miguel de Unamuno (acostumbrado a jugar con un pañuelo atado a la cabeza) ingresó en el Athletic de Bilbao en 1911, si bien no debutó con el equipo vasco hasta dos años después. Al igual que su tío en la literatura el destacó en su faceta, la de delantero centro. De hecho su posición le permitió entrar en la historia del club al anotar el primer tanto que se metió en el estadio San Mamés, el 21 de agosto del año 1913.

Este no fue sino uno en su larga lista, que se elevó en número hasta los 77 goles en 89 partidos entre campeonatos regionales y Copa del Rey, que le convirtieron en un killer de la época y le abrieron las puertas de la selección durante los Juegos Olímpicos de Amberes.

Y todo esto en una carrera que apenas duró una década, pues a las 29 primaveras anunció su retirada harto de las crítcas de la afición para hacerse árbitro. Poco duró sin embargo su nueva vida pues falleció un año después a consecuencia del tifus.

Desde ese momento se sucedieron los homenajes en su equipo de toda la vida y se le realizó una escultura transhumante que primero se colocó en una grada y que en la actualidad se encuentra en el palco presidencial. A ella le realizan una ofrenda floral todos los equipos que visitan por primera vez "La Catedral".

¿Y por qué a pesar de todo apenas sabemos de él? ¿Qué le convierte en un hombre tan importante para el fútbol español? La respuesta está en que nunca fue conocido así sobre los terrenos de juego y que es su sobrenombre el que bautiza a uno de los trofeos individuales más importantes del panorama nacional, ese que entrega cada año el diario Marca desde 1952 al máximo goleador de la Liga. Rafael Moreno Aranzadi es, efectivamente, "Pichichi".

miércoles, 4 de agosto de 2010

¿Qué ha sido de... Edgaras Jankauskas?


La Real Sociedad ha vuelto a Primera y lo ha hecho por la puerta grande, fichando a dos delanteros de relumbrón. Sin embargo no conviene pasar por alto aquellos tiempos en los que esto no sucedía y las posiciones ofensivas las ocupana tipos como Edgaras Jankauskas, que sin tener un mal rendimiento pasó sin pena ni gloria por nuestro país.

Y es que el lituano entra en esa selecta lista de trotamundos del fútbol, siendo uno de esos jugadores que debe agradecerle al balompié el hecho de que le haya permitido conocer mundo pese a pertenecer a uno de esos países de los que pocos futbolistas salen. Precisamente en su tierra fue donde comenzó su carrera formando parte durante cinco años de la plantilla de Zalgiris Vilnius. Allí debutó con 16 años al tiempo que lo hacía con su selección, con la que llegó a las 56 internacionalidades.

Sus primeros pasos lejos de la frontera fueron cortitos y apenas llegaron hasta Rusia, donde jugó en Moscú primero para el CSKA y posteriormente para el Torpedo antes de firmar por el Brujas, donde se convirtió en activo importante en la conquista del título de liga en la temporada de su estreno.

En enero del año 2000 entró en la historia de su nación al pagar la Real Sociedad por él 2.3 millones de euros, la cifra más alta abonada hasta la fecha por un futbolista lituano. Durante sus dos temporadas en el conjunto Txuri Urdin, sólo una y media la pasó en San Sebastián ya que el tiempo restante se marchó cedido al Benfica, donde sus actuaciones (8 goles en 12 partidos) le valieron para firmar por el Oporto de Mourinho.

Allí vivió sus mejores años, convirtiéndose en un recurso de garantías para aquella plantilla que lo conquistó todo hasta que se marchó cedido al Niza, por dónde pasó sin pena ni gloria. Tras dejar el Oporto se marchó al Hearts escocés a través del Zalgiris Kaunas, ambos equipos propiedad de Valdimir Romanov. En su primera temporada dejó buenas cosas pero las lesiones le atacaron en la segunda.

Tras temrinar su vículo contractual se marchó a Chipre para jugar con el AEK Larnaca. Posteriormente se le volvió a presentar una buena oportunidad de la mano del Belenenses pero apenas duró unos partidos antes de decir que prefería jugar cerca de su país y de poner rumbo al Skonto Riga, donde empezó a vislumbrar el final de su carrera.

Sin embargo el destino aún le abrió una última puerta que decidió atravesar. Esa fue la del New England Revolution estadounidense, dónde se ha convertido en uno de esos futbolistas europeos que están potenciando la competición.

lunes, 2 de agosto de 2010

Simplemente, Raúl

Siempre he omitido mi opinión acerca de Raúl en la medida en que suponía meterme en el campo del fútbol nacional, que decidí no tocar en este blog cuando lo creé (salvo cuando alguna vez he hablado de jugadores que pasaron por nuestra Liga en la sección de los miércoles). Hoy que ha fichado por el Schalke 04 puedo hablar libremente de él.

Criticado y admirado a partes iguales, es innegable que son las cifras las que reflejan lo que Raúl ha sido no sólo para el Real Madrid sino también para el fútbol español y el europeo. El hoy delantero del conjunto alemán ha pulverizado durante su carrera casi todos los records existentes hasta la fecha sin ser ni mucho menos el jugador más técnico ni el mejor con el balón en los pies.

Mientras otros realizaban filigranas inverosímiles o controles antológicos él se ha dedicado a lo suyo, a meter goles. Y lo ha hecho con esfuerzo, militando en el profesionalismo extremo hasta el día último en el que se puso la camiseta del club que ha disfrutado de sus mejores años de fútbol.

Muchos defienden que ver con asiduidad la red siendo durante 14 años el delantero titular del Real Madrid es algo fácil. Otros argumentan que la mayoría de los goles del 7 fueron de empujar el balón. A ninguno le falta de razón pero ninguno puede tenerla por completo. Raúl ha sido el delantero titular porque se lo ha merecido, porque nadie ha sido capaz de quitarle el puesto, porque cuándo menos goles metía seguía peleando como el que más, luchando por cada balón como si fuera el último. Y si bien es cierto que últimamente sus goles eran más de listo que de genio para la posteridad quedan obras de arte como el aguanís de la Intercontinental, el gol al Atlético, otro anotado al Rayo o, sin ir más lejos, el que este fin de semana le ha hecho de forma brillante al Bayern.

De Raúl también se ha criticado que no haya sabido marcharse del Madrid a tiempo, que no haya sabido salir antes del club y dejar paso a los que vienen pegando fuerte. Entendible. Pero... ¿Por qué ha de irse un jugador que en las dos temporadas anteriores a ésta ha anotado 18 goles en liga?. ¿Cuántos jugadores hay que lleguen a esas cifras en una Liga y que además repartan cinco asistencias?. Raúl se ha ido cuando se ha dado cuenta que su ciclo se había acabado, cuando se ha visto relegado al banquillo. Y ha aguantado con todo el derecho del mundo, el derecho que da el ser una leyenda del madridismo, lo que le autoriza, por méritos cosechados en el pasado, a poder decidir el momento que él desee para marcharse sin que nadie pueda reprochárselo.

Y muchos aseguran que Raúl se va porque no juega, porque ha perdido peso. ¿Acaso es eso malo? ¿Es criticable que un jugador sea tan competitivo que no pueda soportar no jugar cada fin de semana? Además, en su defensa conviene decir que no se marcha a jugar a Qatar o a un fútbol venido a menos, pone rumbo a un equipo puntero de una liga puntera que disputará la Champions League, donde, que a nadie se le olvide, es el máximo goleador de la historia.

Y quizás se marche allí porque no quiera seguir oyendo esas voces que se levantan contrarias a su persona, esas que ahoran sacan pecho de forma oportunista diciendo que la selección ha ganado un Mundial porque ya no está Raúl. España es campeona del mundo porque tiene la mejor generación de su historia, compuesta de futbolistas punteros que nada tienen que ver con aquellos que fueron compañeros de vestuario de Raúl durante su carrera. El ex delantero madridista, con razón, hoy no tiene sitio. Pero en su haber conviene decir que con la excusa de tirar del carro se ha comido durante su carrera todos los marrones que implicaban el comandar una camada de futbolistas que apuntaba mucho más alto de lo que en realidad era.

Y así, entre luces y sombras se va Raúl, historia viva del fútbol español, hombre callado, profesional de los pies a la cabeza, jugador que jamás tuvo una sola polémica. Tipo cerrado, de apariencia adusta pero del que nadie ha dicho nunca una mala palabra. Un caballero sobre el terreno de juego que en su vida vio una tarjeta roja en Liga. Un ejemplo para todos aquellos jóvenes que algún día quieren ser futbolistas. Otros llegarán que superaran sus cifras, y probablemente no tardarán mucho pero Raúl, si el fútbol es justo, seguirá siendo recordado como el primer gran futbolista que nació en España.